El síndrome de Tourette es uno de los trastornos neuropsiquiátricos más misteriosos; poco se sabe de sus causas pero sí mucho de sus síntomas: tics nerviosos, pequeños espasmos y la realización de comentarios obscenos o socialmente inapropiados. Hace cuatro años la asociación cultural 19 Sobres de Sopa se apropió del término para crear un ciclo multidisciplinar por y para la palabra, El Mal de Tourette. El ciclo se ha ido consolidando en sucesivas ediciones y ahora presenta su nueva temporada, la más ambiciosa de todas, que comienza mañana en el Teatro Cánovas.

Una de las principales novedades de este año es que El Mal de Tourette cuenta con dos exposiciones -que se inauguraron el pasado 3 de mayo en diferentes espacios del citado teatro, y que se podrán visitar en horario de apertura del teatro hasta el próximo 1 de junio-. Otra de las novedades destacables del ciclo es la ampliación de espacios dentro del Cánovas: así la compañía teatral malagueña Bajotierra representará su espectáculo Familia cuervo en un formato más íntimo que Seres Queridos -el montaje del que nace- para espacios no convencionales de aforo reducido para sólo 30 espectadores en el espacio B del teatro los días 28, 29 y 30 de mayo a las 20 horas.

También destacar la inclusión por primera vez de la danza en la programación de El Mal de Tourette, con el espectáculo de la compañía de Ximena Carnevale Todo demasiado oscuro, que se representará el día 30 de mayo a las 21.30 horas.

La palabra es el 50% de una canción, de ahí que la música esté presente en el serial tourettiano. Ahí tendremos a Raúl Bernal, cantante, compositor y líder del proyecto Jean Paul, que repasará, junto con su banda habitual, su cancionero personal y artesano en un espectáculo audiovisual pensado exclusivamente para teatros. La apuesta musical se zanja con la banda Anicet, que funden sonidos e ilustraciones en un live que se presume impactante.

Este festival ha ido adquiriendo una naturaleza híbrida y poliédrica en su programación, en perfecta sintonía con las actuales tendencia artísticas, que no se detienen en disciplinas concretas, anulan fronteras y usan de cualquier herramienta para su fin creador.

El Mal de Tourette ha permanecido siempre atento a las nuevas propuestas que brotan en libertad y le ha abierto sus puertas de par en par, dicen sus responsables -entre los que está Vicente Ortiz, que deja sus píldoras imperfectas dos veces por semana en La Opinión-. Aunque siempre con el hecho poético como norte, no ha dejado de mantener el empeño de ampliar sus objetivos, y contar con artistas y creadores libres y comprometidos. Un compromiso por la palabra, que, sí, tiene mucho futuro.

RecomendacionesTeatro

Sueltos, la compañía formada por Miguel Zurita, Ángel Pedroza y Vicente Ortiz, estreña mañana mismo su tercer espectáculo, en el que se plantea un giro muy claro hacia el lenguaje dramático. El nuevo montaje de Sueltos, titulado Dice P, sin perder de vista la esencia poética, usa códigos teatrales para contar una historia pegada a la realidad actual. Cita imprescindible, por tanto.

Música

La banda barcelonesa Anicet presenta su primer disco en el marco de El Mal de Tourette, Ensayo sobre la generación perdida. Una hora de experiencias a través de las canciones, la nostalgia y las proyecciones. Un espectáculo que se inicia con el monólogo del vídeo Generación perdida y su musicalización en directo para llevarnos a través de un sugerente zapping a la madurez de una generación que es consciente de sus emociones.

Autores clásicos

El viernes 31 de mayo, el certamen presenta la obra de José Pedro Carrión, Júbilo Terminal. Esta obra basada en autores clásicos y contemporáneos es un conflicto entre generaciones que conviven en el tiempo, pero que no llegan a entenderse. A veces ni se relacionan, y mucho menos pueden colaborar para construir un mundo mejor. La obra se representará en la Sala A del Cánovas a las 21.00 horas

@pepalopezmlg