Coincidiendo con un clima de máxima tensión entre el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Málaga y sus representantes sindicales como consecuencia de los dos expedientes disciplinarios abiertos de manera colectiva contra una cincuentena de funcionarios, el Ayuntamiento ha querido tender una mano que afloje ese clima y ha decidido volver a reanudar las negociaciones con los sindicatos con representación en La Casona. Es un gesto que, en este momento, tiene el objetivo de volver a encauzar las relaciones de los responsables municipales con sus trabajadores.

De esta manera mañana, martes 29 de enero, responsables sindicales y del Ayuntamiento volverán a sentarse convocados por el director del área de Personal, Carlos Gómez Cambronero, en nombre del equipo de gobierno.

La cita se anuncia días después de que tanto el alcalde, Francisco de la Torre, como la concejala de Personal, María del Mar Martín Rojo, reconocieran que las protestas eminentemente callejeras de funcionarios, especialmente policías locales, habían vuelto a un escenario de «normalidad», tal como el equipo de gobierno reclamó, por lo que el alcalde señaló que «la mesa de negociación está abierta».

Más plantilla

Tanto los representantes sindicales como el equipo de gobierno consideran prácticamente superado el conflicto en torno al plan de ajuste aprobado por el Ayuntamiento, por lo que las reuniones a partir de ahora se plantean para negociar un nuevo acuerdo (convenio) de funcionarios para 2013. La cita del martes 29 va en esa dirección, que es la de iniciar la negociación para un nuevo acuerdo de funcionarios dado que el actual venció en 2011 y desde entonces está prorrogado.

Los sindicatos acudirán a la mesa negociadora del acuerdo con la idea de recuperar en parte los recortes propiciados en el plan de ajuste y en los decretos del Gobierno central.

Por ello llevarán alternativas que permitan compensar la pérdida de poder adquisitivo que han sufrido los funcionarios en los dos últimos años.

Ello pasa por mantener básicamente el actual acuerdo de funcionarios en sus aspectos esenciales y arrancar a su vez el compromiso de un aumento de la plantilla que se centraría esencialmente en Policía Local, Bomberos y Servicios Operativos, estos últimos con una plantilla cada vez mas mermada.

Por contra, el equipo de gobierno querrá, por un lado dilatar las negociaciones y, de otro, ceñirse a las planes de ajuste y de recortes impulsados por el Gobierno central.

El margen de maniobra es escasos pero lo sindicatos confían en su fuerza y especialmente en demostrar que la crisis y los ajustes no pueden ni deben anular el derecho a negociar las relaciones laborales.

Todos los sindicatos con representación en el Ayuntamiento acudirán con sus representantes a la reunión de la mesa negociadora. Algunos, sin embargo, como el Sindicato Independiente de Policía de Andalucía (SIP-AN), mantendrán a la vez en paralelo sus acciones de protesta contra el plan de ajuste.

Una vez abierta la mesa negociadora para el acuerdo de funcionarios, el equipo de gobierno deberá hacer lo mismo en próximas fechas con la mesa para negociar un nuevo convenio colectivo de la plantilla de laborales, que también está prorrogado.

Los datosReunión

Mañana, martes 29, está convocada la mesa negociadora para el acuerdo (convenio) de funcionarios. Todos los sindicatos representados han comprometido su asistencia. Se trata de la primera reunión que abrirá las negociaciones para dicho acuerdo.

Propuestas

Los sindicatos van a esta negociación con varias ideas. Por un lado, compensar lo que han perdido en el plan de ajuste y por medio de los decretos del Gobierno; de otro, mantener los principales acuerdos logrados en el convenio actual y en tercer lugar obtener un compromiso de aumento de la plantilla en varias áreas como Policía Local, Bomberos y Servicios Operativos.

Postura municipal

El equipo de gobierno peleará por ceñirse a lo establecido en el plan de ajuste y en los planes del Gobierno central, a la espera de una mejoría económica. En principio, su única concesión a los trabajadores municipales sería el ir mitigando en los próximos años los recortes salariales previstos en el plan de ajuste para rebajar sus efectos especialmente en lo concerniente a los pluses, horas extras y baja por incapacidad.