­La comisión que deberá decidir si la Junta retira o no el concierto al colegio San Patricio de Málaga, de la Fundación Diocesana Santa María de la Victoria, que depende del Obispado, y en el que cursaba estudios hasta ahora el menor transexual de siete años que se siente niña, se constituirá a principios de marzo.

La delegada de Educación, Patricia Alba, explicó que en esta comisión, que se crea para determinar los incumplimientos o no de este centro educativo, están representados el colegio San Patricio y la Administración andaluza.

Alba, que visitó ayer Alozaina junto al consejero de Educación, Luciano Alonso, las escuelas taller y talleres de empleo en los municipios de la Sierra de las Nieves, aseguró que la decisión de la familia de cambiar de colegio a la menor «es una cuestión personal y está en su derecho».

«La madre solicitó una plaza libre en alguno de los centros de la zona y desde Educación se la hemos facilitado», manifestó Alba, lamentando el «incumplimiento» por parte del colegio San Patricio de las recomendaciones hechas por la Junta relativas al uniforme.

El abogado de la familia, Oliver Roales, anunció ayer que están estudiando iniciar acciones legales contra el colegio San Patricio, apuntando que el hecho de que se archivara la investigación iniciada por la Fiscalía «en absoluto» supone un freno.

Además, anunció que se querellará contra el obispo de Málaga, Jesús Catalá, por un supuesto delito de «calumnias» hacia la madre. Según Roales, la querella se interpondrá tras un acto de conciliación si el obispo no reconoce que sus palabras fueron «inciertas, ofensivas hacia la madre y que no tienen conexión con la realidad», al acusarla de «no respetar la identidad sexual» de su hija.