­Para los sindicatos policiales, un refuerzo insuficiente de agentes en las comisarías de la Costa del Sol supone un servicio deficiente al ciudadano y unas condiciones de trabajo para los agentes poco recomendables. Los responsables de las principales organizaciones sindicales coinciden en el argumento de que, con menos personal y una población que prácticamente se cuadriplica durante los meses de verano, las condiciones laborales dificultan enormemente la conciliación familiar y laboral, que es «prácticamente imposible». Esto, según las fuentes, está convirtiendo a las comisarías de la provincia de Málaga en «destinos incómodos» tanto para los funcionarios de la plantilla como para los agentes que se plantean elegirla como destino.

En este sentido, el PSOE denunció el pasado mes de abril que la provincia ha perdido más de un centenar de efectivos de la Policía y la Guardia Civil desde el año 2011. A través de una respuesta parlamentaria, los socialistas aseguraron que el Gobierno reconoció el mes pasado «un recorte de 97 policías y 17 agentes de la Guardia Civil»; un total de 114 efectivos menos de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en las calles de Málaga.

El diputado y secretario general del PSOE de Málaga, Miguel Ángel Heredia, reveló también datos que «redundan en menos vigilancia y en un deterioro de la seguridad ciudadana». Concretamente, Heredia explicó que el número de vehículos policiales descendió y el gasto mensual de combustible, en el caso de la Guardia Civil se ha reducido en un 10%, cuerpo que al parecer no recibió ningún tipo de inversión para la mejora de cuarteles.