Las ventas de viviendas a extranjeros no residentes aumentaron en Málaga un 45 por ciento durante el primer semestre de este año en relación al mismo periodo de 2013, de manera que los ciudadanos foráneos casi acaparan una de cada dos transacciones en la provincia.

El presidente de la Diputación de Málaga y del Patronato de Turismo de la Costa del Sol, Elías Bendodo, ha destacado hoy en rueda de prensa el "excelente" comportamiento del turismo residencial en la provincia de Málaga, que es "la que más vende" en España después de Alicante.

Entre enero y junio de este año se vendieron en Málaga 4.739 viviendas a extranjeros no residentes, que supone la cifra más alta desde 2007, por lo que Bendodo cree que se puede hablar de una "verdadera recuperación" del turismo residencial.

Teniendo en cuenta que el total de viviendas vendidas ascendió a 11.128 en el primer semestre del año, los extranjeros protagonizaron el 43 por ciento de las compras en la provincia, casi una de cada dos.

El turismo residencial está "viviendo un momento dulce", puesto que al cierre de 2013 ya creció un 22 por ciento, ha subrayado el presidente de la Diputación malagueña.

Tras calificar estos datos de "espectaculares", Bendodo ha argumentado que justifican la apuesta por el producto "Living Costa del Sol", que nació para crear seguridad jurídica y dar salida al excedente de viviendas.

En opinión del presidente de la Asociación de Constructores y Promotores de Málaga (ACP), José Prado, "los datos no pueden ser más positivos", puesto que en 2007 el porcentaje de las viviendas vendidas a extranjeros no residentes alcanzó el 16,6 por ciento, y ahora representa casi la mitad.

La promoción se ha dirigido en los últimos años a los países cuyos clientes ya eran "asiduos" a la Costa del Sol y a otros mercados emergentes, y "algo ha tenido que ver" esta iniciativa en los resultados, ha asegurado.

Por países de procedencia, Prado ha detallado que los británicos siguen liderando la compra de vivienda de extranjeros en Málaga, con una cuota próxima al 10 por ciento -1.018 transacciones en el primer semestre- y un crecimiento interanual del 61,6 por ciento.

Le siguen los países nórdicos con un 9 por ciento -Noruega, Suecia y Dinamarca suman un millar de viviendas adquiridas-, y el Benelux (Bélgica, Holanda y Luxemburgo) con un 5 por ciento.

Rusia tiene un peso del 3 por ciento, que se hubiera duplicado "si no hubiera sido por los problemas políticos", según Prado.

En cuanto a la inversión, británicos y alemanes suelen comprar viviendas cuyo coste ronda los 1.500 euros por metro cuadrado; los clientes de países nórdicos y Benelux se decantan por inmuebles cuyo precio asciende a 1.700 el metro cuadrado y los rusos pagan casas con costes más altos.

Los promotores han detectado que "se están posicionando" mercados como China y Canadá en la compra de viviendas porque ya existen intermediarios inmobiliarios interesados para sus clientes.

El presidente de la ACP ha criticado las "cortapisas" que supone a las inversiones extranjeras en España la Ley 7/2012 sobre blanqueo de capitales, mientras que Portugal da facilidades mediante la exención de impuestos a las inversiones extranjeras en vivienda.