Con la sensación de que ha sido una legislatura con dificultades pero satisfactoria, el alcalde de Coín, Gabriel Clavijo, hace un balance de los tres últimos años de gobierno y de los puntos negros que no se han podido solucionar, «aunque la legislatura aún no ha terminado», justifica.

¿Qué balance hace de estos tres años de mandato?

En estos tres años hemos iniciado una legislatura con dificultades porque no obtuve la mayoría absoluta. Estuvimos seis meses en una situación de precariedad donde el PP intentaba hacer contra gobierno para crear un voto de censura programado para después de las elecciones generales y autonómicas. En enero de 2008 se llegó el acuerdo entre el PSOE y el PA, que dio estabilidad al gobierno. Solucionada la crisis institucional, nos encontramos con la crisis económica para la que tuvimos que articular mecanismos para rentabilizar la inversión pública. Aprobamos un crédito extraordinario para pagar más del 50 por ciento de la deuda del Ayuntamiento desde el 89 al 93 y hoy por hoy Coín es uno de los municipios de la provincia con más inversión pública.

¿En qué proyectos se ha trabajado?.

En calles y equipamientos como la guardería, el geriátrico, el centro de alzheimer, el teatro... Hemos trabajado buscando inversión pública y continuamos en esa línea y en la creación de nuevos mercados de trabajo, de nueva economía. Estamos satisfechos, aunque también hay algunos puntos negros que no hemos podido solucionar, pero la legislatura no ha terminado.

¿Cómo afectará el plan de austeridad del gobierno a Coín si se reducen las inversiones públicas?

Hay que hacer un plan de ajuste. Esto es una bolsa y el dinero que se reparte es el de los impuestos de los españoles. Tenemos una ventaja en este plan, por que las inversiones que ya están en marcha continuarán su curso. Nos hemos adelantado en los tramites con este fin. No es cuestión de inaugurar lo antes posible.

¿Cuáles son los proyectos que hay ahora en marcha?

Ahora la remodelación del campo de fútbol, la reforma de la piscina municipal, la puesta en marcha del colegio Carazony, el teatro, la guardería, el centro territorial de empleo... Son muchos esfuerzos puestos que los ciudadanos están agradeciendo.

¿Qué se le queda pendiente?

Actuaciones que no dependen de la acción política. El Ayuntamiento hace todo lo que está en su mano con todos los proyectos, pero en la iniciativa privada, aunque brindemos toda la ayuda, puede ocurrir como con el hospital polivalente que, después de tener los terrenos y el compromiso institucional, se paralizó a la hora de presentar el aval, pero también entiendo la actual situación económica.

¿Se ha convertido Coín en el centro de la comarca del Guadalhorce?

Cuando llegué en 2003 mi objetivo era que los coineños estuvieran orgullosos de su pueblo. Nadie puede negar el esfuerzo hecho para que Coín sea la capital del Guadalhorce. Tanto en inversiones como en equipamientos, carreteras, el tercer juzgado, la Tesorería... Y pensando en el futuro el POTAUM tendrá una repercusión extraordinaria. Coín es el único municipio de Andalucía que tiene todas las áreas de oportunidad y permitirá que nuestro municipio sea la rótula del Guadalhorce.

El nombre de Coín también se ha escuchado últimamente por la polémica de la prohibición del burka.

Desde que soy alcalde de Coín, las políticas de igualdad y de integración de la población emigrante son una preocupación diaria, ya que forman parte de nuestra identidad en una sociedad democrática que transmite la igualdad de una forma transversal para todas las personas que viven en nuestra comunidad, que comparten nuestra sanidad pública, nuestros colegios públicos, nuestras bibliotecas, nuestros parques y jardines… En definitiva, una sociedad que avanza para todos y todas sin discriminación de raza, cultura o religión. La utilización del burka y el nikab es un obstáculo para las mujeres en ese proceso de integración y de dignidad, que desde nuestra óptica hay que corregir y concienciar de que ése no es el camino, porque no defiende esos valores democráticos y esas conquistas sociales que tanto está costando a tantas mujeres. En cuanto a que esas vestimentas impiden su identificación en cualquier espacio público, es obvio y notorio y recuerdan comparecencias en los medios de comunicación en otros ámbitos. Sin ánimo de comparación...

¿Cómo afrontará las próximo año de cara a las elecciones?

Yo soy alcalde de Coín y mi única voluntad es seguir siendo alcalde de Coín, al menos la próxima legislatura, con el apoyo de mi partido. Dejé el Parlament porque quería ser alcalde, porque tenía proyectos para Coín, y quiero mantener la confianza de los ciudadanos.