Otro aspecto para el optimismo. Si la perforadora ha avanzado a tres metros por hora durante las primeras horas de trabajo en la apertura del túnel vertical que se construye paralelo al pozo donde se encuentra el pequeño Julen, la lluvia apenas va a hacer acto de presencia en el Cerro de la Corona.

Los técnicos han remarcado esta noche las ventajas añadidas para el transporte de material y la evolución del trabajo de la perforadora de estas circunstancias. "Apenas ha llovido este sábado y para esta madrugada se ha rebajado la previsión de lluvia al mínimo. Es otra buena noticia, después de estos dos últimos días en los que la pizarra generaba más incertidumbre que otra cosa a lo que García Vidal os había manifestado", indica uno de los expertos consultados.

Así apenas está previsto que caigan un máximo de 1,5 litros por metro cuadrado en las primeras dos horas de este domingo. Con estas perspectivas, la labor de la perforadora únicamente estaría condicionada a la dureza del terreno, con lo que los especialistas tampoco quieren aventurarse a confirmar un horario para indicar a qué hora podrían los mineros adentrarse en el pozo original en las primeras horas de la madrugada del domingo al lunes.

El macizo rocoso de la Cima de la Corona, situada entre el casco urbano de Totalán y la barriada malagueña de Ojén, se ha mostrado como un obstáculo repleto de «trampas geológicas» para unas obras «que en condiciones normales estarían precedidas de un estudio geotécnico y las correspondientes medidas para solventar con seguridad el camino más seguro», agregaba este sábado el presidente del Consorcio Provincial de Bomberos y diputado provincial, Francisco Delgado Bonilla.