«La ganadería caprina es uno de los pilares del primario malagueño»

«El agroalimentario debe estar preparado para adaptarse a todos los cambios sociales, económicos y estructurales que se van produciendo» - «El reto inmediato es la digitalización y modernización de la producción»

Francisco Salado, presidente de la Diputación de Málaga.

Francisco Salado, presidente de la Diputación de Málaga. / Álex Zea

El presidente de la Diputación malagueña comenta con La Opinión los aspectos más importantes del sector del campo malagueño, donde la sequía es la gran protagonista.

¿Por qué el chivo de Canillas y el chivo lechal malagueño están tan valorados dentro y fuera de nuestra provincia?

Es un producto único, capaz de atraer por sí solo a miles de visitantes al municipio. El chivo constituye uno de los grandes reclamos turísticos de Canillas, junto a El Saltillo, una infraestructura impulsada por la Diputación de Málaga que también ha dinamizado la economía de la zona. Es un plato típico que siempre se ha cocinado en las casas del pueblo y que, de la mano de los restaurantes, se ha hecho muy popular. Cuenta con el apoyo decidido de Sabor a Málaga, la marca que creamos hace ya más de una década para promocionar los productos agroalimentarios de la provincia.

La Diputación ha apoyado la nueva campaña del proyecto Gastronomía de Canillas que impulsa el chivo como producto gourmet. Una apuesta decidida por parte de la institución que preside, ¿no es así?

Lo hemos tenido claro desde el principio y por eso hemos apoyado sin fisuras este proyecto. El chivo es un producto de altísima calidad, excepcional. El chivo lechal malagueño es la primera carne caprina española y la primera carne fresca en Andalucía que cuenta con una marca de calidad. Además de su exquisitez y de su valor nutritivo, la producción caprina tiene un gran potencial para el desarrollo sostenible local y para el arraigo de los ganaderos a la tierra, es decir, que nos ayuda a seguir avanzando en la lucha contra el despoblamiento, que es uno de los ejes transversales de nuestra acción de gobierno. En cuanto al proyecto para impulsar el chivo como producto goumet, ‘Gastronomía de Canillas’, los resultados son realmente buenos.

Las asociaciones AGASUR y AGAMMA, adheridas a Sabor a Málaga, se han fusionado recientemente para crear la mayor cooperativa caprina de Andalucía ¿qué opinión le merece este acuerdo?

Es una gran noticia para estos colectivos, para todo el sector agroalimentario y para la economía de la provincia. Con esta fusión, que ha propiciado el nacimiento de AGAMMASUR, esta cooperativa se convertirá en una de las mayores de España, con un facturación que alcanzará este año los 30 millones de euros. La ganadería caprina es uno de los pilares del sector primario malagueño, que es fundamental a su vez para la economía provincial. AGAMMASUR propiciará un mayor crecimiento económico y generará nuevas oportunidades laborales y empresariales en las zonas rurales, algo que es muy interesante para la provincia. Estamos muy orgullosos de que estas dos entidades adheridas a Sabor a Málaga hayan dado este paso adelante, que será beneficioso para todo el sector.

Hábleme de esos 3,4 millones de euros que la Diputación de Málaga va a destinar a obras del Programa de Fomento de Empleo Agrario.

Este programa es muy importante para la vertebración de la provincia y para evitar la despoblación de los núcleos rurales, especialmente los del interior. Este año, efectivamente, la Diputación de Málaga destina a este programa algo más de 3,4 millones de euros, con los que se llevan a cabo un total de 310 actuaciones que conllevan más de 15.000 contratos para personas en situación de desempleo. Además de la parte que nos corresponde, hacemos una aportación voluntaria porque somos conscientes de que este dinero está bien invertido en nuestros pueblos y se destina, entre otras cuestiones, al arreglo de calles, plazas y caminos, la mejora de dependencias municipales, instalaciones deportivas, sociales y culturales o la eliminación de barreras arquitectónicas.

¿Cuáles son los principales retos a los que se enfrenta el sector del campo malagueño?

Como todos los sectores, el agroalimentario tiene que estar siempre preparado para adaptarse a los cambios sociales, económicos y estructurales que se van produciendo. Uno de los retos a los que se enfrenta de manera inmediata es a la digitalización y modernización de las instalaciones y de la producción. Y esto nos lleva a otro objetivo: el crecimiento de las empresas y su capacidad para exportar. Tenemos productos de una calidad excepcional y aún existe un amplio margen de mejora en la internacionalización de nuestras empresas. Por supuesto, la gestión del agua es otro de los grandes retos que afronta no sólo este sector, sino toda la provincia.

¿Qué opinión le merece que los productores de la Feria Sabor a Málaga en Rincón de la Victoria hayan incrementado sus ventas en un 62,6% respecto al año pasado.

Para elaborar la estrategia de Sabor a Málaga contamos con la participación y opinión de los productores, que son quienes mejor conocen las necesidades del sector en cada momento. No sólo hemos obtenido buenos resultados en esa feria comarcal, sino que también han sido exitosas las que hemos desarrollado en Antequera, Ronda, Torremolinos o Nerja. Con estas ferias hemos despertado, por un lado, el orgullo de pertenencia a Sabor a Málaga, pero también el de los compradores, que adquieren los productos de la tierra siendo conscientes de que están comprando artículos de calidad que, además, ayudan a mejorar la economía de la provincia e incluso el medioambiente, porque son productos de cercanía y sostenibles. Estas cifras nos animan a seguir apostando por esta estrategia.

¿Cómo está gestionando la Diputación la ausencia de agua y la escasez de recursos hídricos que sufre la provincia malagueña y que tanto afecta al sector agrícola y ganadero?

La sequía es un problema terrible que, como decía antes, afecta a todos los ciudadanos y a todos los sectores productivos. El desarrollo de obras hidráulicas y la mejora del abastecimiento y reciclaje de agua son ejes prioritarios para la Diputación de Málaga. Estamos haciendo todo lo que está en nuestra mano y mantenemos el compromiso de destinar 200 millones de euros en los próximos cuatro años a mejorar la capacidad de la provincia para afrontar periodos de sequía tan graves como el que ahora padecemos, pero necesitamos que los municipios redacten los proyectos técnicos en la medida de sus posibilidades. En cualquier caso, la situación en la que nos encontramos se debe a la falta de lluvias, es evidente, pero también a la ausencia de inversiones importantes. La Junta de Andalucía ha hecho y está haciendo un esfuerzo extraordinario, pero necesitamos también inversiones del Gobierno central, que de momento no llegan.