«Cuando era adolescente veía comportamientos peores pero no se grababan»

En un pueblo gallego de montaña, una adolescente desaparece tras hacerse público un vídeo sexual filmado sin su consentimiento. Mientras, el pueblo se queda incomunicado y se cae internet. Esto es As neves.

¿De dónde viene esta historia?

De muchas cosas. Por un lado, de mi curiosidad por los adolescentes: llevo diez años trabajando en un festival de contenidos digitales así que llevo tiempo conviviendo con sus narrativas y su forma de ver el mundo, cómo compaginan el mundo real con el digital. Y, por otro lado, me interesaba una historia en la que se les va despojando de las capas: primero, hay una tormenta que aísla el pueblo; después, se corta internet... Me interesaba mucho el limbo entre vivir hiperconectado pero a la vez hacerlo en una zona que se puede quedar aislada, en el que el siguiente pueblo está a una hora en montaña.

El tema generacional es fundamental en la película.

Puede que As neves sea un retrato generacional, sobre esos chicas y chicas de hoy en día inmersos en cierto contexto tecnológico (porque yo, de adolescente, vi comportamientos bastante peores aunque, claro, no se grababan con el móvil). Pero también es un retrato de la adolescencia como tal, de cometer errores, de hacer las cosas porque sí sin pensar en las consecuencias.

Y está el pueblo, que tiene su peso específico, que puede condicionar la adolescencia.

Si vives en un pueblo donde sólo hay 20 adolescentes, tampoco tienes muchas maneras de desarrollar a lo mejor tu propia personalidad o encontrar compinches con tu propia personalidad. Así que hay una cosa que muy hermosa, que es que en el fondo se tienen que entender y que son una pandilla. 

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