Aviso de la DGT: esta es la multa que te puede llegar después de ir al supermercado

Las sanciones de tráfico son un gasto imprevisto que conviene evitar por esa razón es importante conocer todas las normas de tráfico y respetarlas hasta la última coma.

Pero, en ocasiones de nuestra vida cotidiana, a veces pasamos por alto estas normas sin llegar a ser completamente conscientes de las posibles consecuencias. Por este motivo, la Dirección General de Tráfico (DGT) publica periódicamente avisos en sus cuentas oficiales de redes sociales para transmitir a la población cuáles son las regulaciones a las que tienen que estar atentos.

La normativa está repleta de acciones que, aunque puedan parecer aparentemente inocentes, pueden suponer una infracción. Es el caso de dejar las bolsas de la compra sueltas dentro del coche cuando volvemos del supermercado: una práctica a la que nadie presta atención pero que puede ser motivo de sanción por parte de la policía que regula el tráfico.

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Multa al volver del supermercado por esta práctica que todos hacemos

La norma que regula la prohibición de llevar la compra suelta en el coche cuando volvemos del supermercado o de cualquier otro establecimiento es el artículo 14 del Reglamento General de Circulación, que establece que la carga dentro del coche debe estar dispuesta de forma que no comprometa la seguridad del conductor ni de sus acompañantes, además de la estabilidad del vehículo.

En base a este planteamiento, la práctica de dejar objetos sueltos como bolsas de la compra en los asientos de la parte de atrás del coche puede acarrear multas de entre 80 y 200 euros en función de la gravedad de la infracción y el compromiso a la seguridad o la estabilidad del vehículo.

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Esta sanción no solo es importante por el gasto económico que conlleva, sino porque representa un importante peligro para nuestra seguridad a la hora de circular igual que sucede con otras acciones que también están penadas como son el caso de manipular objetos mientras que se conduce, dificultar la visión o la movilidad del conductor, superar la masa autorizada del coche u obstaculizar la vía.

En concreto, los riesgos para la seguridad que entraña el no llevar la compra adecuadamente sujeta dentro de la cabina del coche van desde el efecto elefante (cuando un objeto suelto dentro del coche se puede convertir en un proyectil peligroso en caso de frenazo repentino), el atasco de los pedales (cuando un objeto pequeño bloquea el pedal y compromete su control) o cambios en el comportamiento del coche (cuando una carga pesada afecta a la aceleración, la distancia de frenado o la tracción de los neumáticos).