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Energía

Más que un traslado, un proyecto de ingeniería

Más que un traslado, un proyecto de ingenieríaARCINIEGA

La maquinaria pesada imprescindible para el funcionamiento de la centra eléctrica de ciclo combinado de Campanillas ya está en Málaga. A lo largo de esta semana se ha llevado a cabo la primera fase del traslado de turbinas y generadores entre el Puerto y el Centro de Transportes y Mercancías (CTM), y a partir de mañana se ejecutará la segunda, desde este punto hasta los terrenos en los que se construye la central. Esta operación debería haberse iniciado en la noche del jueves a ayer viernes, pero el Ayuntamiento decidió retrasarla hasta la madrugada de pasado mañana, lunes, para no entorpecer la feria del núcleo de Campanillas.

Según manifestó ayer a este periódico el concejal de Movilidad y Tráfico del Ayuntamiento, Juan Ramón Casero, el proceso de transporte de los materiales es muy complicado desde el punto de vista técnico. Unas averías e incidentes surgidos en la primera jornada del traslado de la turbina desde el Puerto al CTM, en la madrugada del martes pasado, originó retenciones kilométricas a primeras horas de la mañana. Sin embargo, en las dos siguientes noches no hubo incidencias y reinó la normalidad.

Preparativos. Las críticas por el caos de tráfico no se hicieron esperar, aunque Casero aduce que un proceso como éste es complicado y se presta a imprevistos que pueden generar retenciones. De hecho, es más un proyecto de ingeniería que un simple traslado; los preparativos del dispositivo de tráfico necesario para trasladar las turbinas comenzaron en enero entre el Ayuntamiento, Fomento, Interior y la Dirección General de Tráfico. Hubo que emplear dos noches en instalar una pasarela en el céntrico puente de Tetuán para reforzar la estructura y que no se hundiera con el paso del convoy.

La segunda fase, desde el CTM a Campanillas, se prevé menos complicada, ya que los grandes vehículos no tienen que atravesar el centro urbano. Las inmensas turbinas y generadores llegaron hace dos semanas al Puerto desde Bilbao y han tenido que transportarse a velocidades inferiores a los diez kilómetros por hora.

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