La provincia de Málaga tiene 1,5 millones de habitantes. Al menos así reza en las estadísticas oficiales elaboradas por el Instituto Nacional de Estadística (INE) a 1 de enero de 2008. Sin embargo, la realidad es mucho más compleja y nos muestra un buen puñado de municipios costeros que atienden a una población mucho mayor y que no está en las estadísticas oficiales. Es la población flotante, que elevaría hasta un 56% el censo.

Catorce grandes municipios de la provincia, incluyendo la capital, agrupan a la gran mayoría de la población malagueña. Acumulan un censo de 1.196.596 habitantes, una cifra notable y que representa tres de cada cuatro vecinos de la provincia. Sin embargo, estos ayuntamientos se ven desbordados por una población real mayor y que escapa a las estadísticas. Son muchas las personas que residen de forma habitual, o al menos durante largas temporadas, en municipios malagueños sin estar empadronadas. Las estimaciones de los distintos consistorios elevan a más de 600.000 personas la población en estos catorce municipios, elevando su censo oficioso a 1,86 millones de personas.

Es difícil contar con datos exactos de la población no empadronada que reside en municipios malagueños, aunque todos los ayuntamientos, en menor o mayor medida hacen sus cálculos. El volumen de basura recogida, el número de líneas telefónicas, el consumo eléctrico, la cantidad de viviendas construidas o el tráfico permiten hacer distintas estimaciones.

A partir de estos cálculos, Nerja, Marbella, Torremolinos y Mijas son los que tienen un mayor volumen de población flotante. Tanta que duplican con holgura, e incluso triplican, el número de vecinos en determinadas épocas. El caso de Nerja es quizá el más llamativo, con 21.621 habitantes, el consistorio calcula una población de más de 60.000 personas en verano. Tres veces más de lo reconocido oficialmente.

Marbella. Lo mismo ocurre con Marbella, que es el segundo municipio en importancia de la provincia con una población de 130.549 habitantes, según los datos del INE a 1 de enero de 2008, pero que alcanza los 343.000 vecinos en diversos momentos del año. El Ayuntamiento marbellí apunta que esta afluencia sitúa a este municipio "como la tercera ciudad andaluza justo por detrás de Sevilla y Málaga", según el portavoz municipal, Félix Romero, quien apunta que el mismo censo oficial destaca a esta ciudad por encima de Cádiz.

Para aumentar su censo real, el consistorio mantiene una campaña de empadronamiento desde hace cerca de un año que consiste básicamente en facilitarle la tramitación a los residentes, en su mayoría foráneos, y hacer una fuerte promoción publicitaria en la que se han repartido más de 50.000 dípticos informativos explicando el procedimiento y las ventajas de empadronarse.

Estos resultados, no sólo en Marbella, tienen como principal causa la atracción turística de estas localidades. No es casual que los mayores picos de población se den en los meses de verano. De hecho, el Ayuntamiento de Torremolinos calcula que puede llegar a los 300.000 habitantes en agosto, pese a que su población supera levemente los 63.000.

Queda un segundo elemento, como es la población inmigrante, muy móvil y con un índice de situaciones irregulares bastante notable. Eso les hace ser un colectivo reacio a aparecer en los estudios oficiales.

Caso especial. Fuengirola es un municipio peculiar a la hora de hablar de población. A sus 68.646 vecinos censados hay que sumar otros 50.000 habitantes más de población flotante que usan los servicios municipales. El elemento que distorsiona estos datos con principal fuerza es su falta de espacio. Fuengirola tiene una superficie 18 veces menor que la media, con sólo 10 kilómetros cuadrados, y una densidad 100 veces mayor que el resto de las localidades.

Esta situación ha llevado a que la alcaldesa de Fuengirola, Esperanza Oña, firmara el pasado 11 de enero un convenio con la Consejería de Gobernación por el cual la Junta destina 2,3 millones de euros para la mejora de infraestructuras y compensar esta situación.

El contrapunto a esta situación lo aporta Antequera, que siendo capital de comarca y una de las ciudades más pobladas de la provincia, con sus 45.891 habitantes, apenas cuenta con una población flotante del 2% sobre la oficial.

Los estudios municipales señalan que apenas vive un millar de personas sin estar empadronadas en Antequera, una situación muy diferente respecto al resto de los municipios estudiados, donde se dispone de un mínimo del 16% más de población.