Las malagueñas Novasoft, Consoltic y Properly obtienen el certificado de calidad CMMI

Las empresas malagueñas de Tecnología de la Información y la Comunicación (TIC), Novasoft, Consoltic y Properly han obtenido la certificación de calidad CMMI de nivel dos, a través de la tercera edición del Plan Integral para la Mejora de la Competitividad de la Pyme TIC Andaluza --denominado 'Pymética'--, impulsado por la Asociación de Empresas de Tecnologías de la Información y Comunicación de Andalucía (Eticom).

Este programa, en el que participa la Sociedad Andaluza para el Desarrollo de las Telecomunicaciones de la Junta de Andalucía (Sandetel), supone un reconocimiento "que sitúa a estas compañías a la vanguardia de la industria española del software", según indicaron desde Eticom, a través de un comunicado.

Junto a estas empresas, otras 12 TICs andaluzas han obtenido esta certificación dentro de Pymética, que significa "la mayor iniciativa de colaboración en mejora de procesos y certificación en el ámbito nacional".

Así, explicaron que el CMMI (Capability Maturity Model Integration) es el estándar mundial para la mejora de los procesos de desarrollo y mantenimiento de sistemas y productos de software que otorga el Software Engineering Institute (SEI) de la universidad norteamericana Carnegie Mellon (Pittsburg, Pennsylvania). Actualmente, sólo 15 empresas andaluzas poseen el CMMI de nivel dos debido a su "elevada complejidad y exigencia".

'Pymética CMMI' es un programa cofinanciado por el Plan Avanza del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, dentro del Plan Nacional de Investigación Científica, Desarrollo e Innovación Tecnológica 2004-2007, así como por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder), cuya duración se ha extendido desde finales de 2007 a junio de 2009.

Según manifestaron, Eticom ha alcanzado recientemente un acuerdo con el SEI, que permitirá que el software producido por las empresas en Andalucía sea reconocido por su "carácter innovador y de alto valor" para el negocio de sus usuarios, frente a otros competidores que centran su oferta en el bajo coste laboral de sus recursos, como ocurre con el offshore o outsourcing remoto.