La provincia de Málaga está inmersa en la tercera fase del proceso del ´apagón´ analógico, precisamente la que afectará progresivamente a los municipios más poblados de la provincia –incluida Málaga capital– y para la que la Subdelegación del Gobierno ha convocado hoy una reunión con los ayuntamientos implicados. En la provincia ya se han producido dos apagado selectivos que dejaron sin la histórica señal de televisión digital a 28 municipios, 20 en diciembre y otros 8 en enero.

El resto, hasta los 101 totales, abandonarán ahora el sistema analógico en la tercera fase del plan nacional del Gobierno, que establece la transición antes del 3 de abril (fecha tope). Las localidades se dividen a su vez en dos proyectos: el primero, con Mijas como núcleo, incluirá al grueso de poblaciones, excepto Cartajima, Pujerra y Ronda, que se integrarán en el ámbito de Valencina de la Concepción.

Los pasados 15 y 21 de diciembre dijeron adiós a la TV tradicional los centros emisores de Algatocín, Alpandeire, Atajate, Benadalid, Benahavís, Benalauría, Benarrabá, Benaoján, Casares, Cortes de la Frontera, Estepona, Faraján, Gaucín, Genalguacil, Igualeja, Jimera de Líbar, Jubrique, Júzcar, Montejaque y Parauta, con una población total de casi 80.000 ciudadanos, según los datos facilitados por el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio. Todos ellos estaban en la zona influencia del centro emisor de San Roque (Cádiz).

Posteriormente, el 18 de enero, se unieron Coín, Frigiliana, Guaro, Monda, Nerja, Torrox, Vélez Málaga y Torremolinos, con otras 189.230 personas implicadas. En esta ocasión fue la puesta en marcha del centro emisor de Sierra de Líjar (Almería).

El Ministerio, de momento, afirma que el proceso de adaptación se está realizando "sin contingencias" reseñables, mientras que las asociaciones de consumidores recomiendan a los usuarios de la provincia comprobar en la web de Industria si el municipio recibe de manera certera la señal para, posteriormente, verificar si se requiere algún retoque en la antena o el cableado, lo que resulta más frecuente en las viviendas antiguas.

Ventas en ascenso. Y mientras se aproxima el ´apagón´ analógico y el ´encendido´ digital, el sector comercial y las grandes superficies reconocen que las ventas de televisores han aumentado entre un 30% y un 40%, impulsadas también por las rebajas y promociones de enero y febrero. "El cliente se está planteando aprovechar el salto a la TDT para renovar el televisor", comentan portavoces del sector consultados por este periódico, que auguran también una subida exponencial de la demanda a medida que se acerque abril.

Por si acaso, algunos comentan que están haciendo también acopio de ´stock´ de televisores, para que una posible avalancha de clientes no les pillen desprevenidos. "Tenemos la experiencia de Baleares, donde ya se ha producido el ´apagón´ y que tuvieron dos fines de semana previos increíbles de ventas. En muchos sitios se agotaron las teles", apuntan.