El delegado diocesano de Cáritas, Gabriel Leal, quiso agradecer personalmente la «increíble generosidad» de los malagueños que confían en esta institución como cauce de solidaridad para administrar sus aportaciones y destacó los 2,3 millones de euros que han salido de donativos de las parroquias.
La principal fuente de financiación de Cáritas son los más de 4.700 socios y donantes, que aportaron en 2013 3,87 millones de euros (un 16,51% más que el año anterior). Cáritas destacó la ayuda que recibe incluso de personas que no son de confesión cristiana. «No comparten nuestras motivaciones pero sí nuestros fines. A todos ellos muchas gracias», comentó. Las ayudas de los socios permiten a la institución mantener un carácter «independiente» aunque también se reciban subvenciones por valor de 1,3 millones procedentes de convenios con las Administraciones Públicas, destinadas fundamentalmente a centros sociosanitarios y talleres de formación. Cáritas agradeció especialmente el apoyo recibido del Ayuntamiento de Málaga. También mostró su «preocupación» por el freno que desde junio de 2012 sufre la Ley de Dependencia y el Programa de Respiro Familiar.
