Como ha ocurrido con todos los comercios y negocios desde que se decretó el Estado de Alarma, el restaurante El Pikón, ubicado en El Ejido, cerró sus puertas hace más de 40 días. En plena cuarentena, este negocio cumple 12 años a flote y ha decidido celebrarlo "ayudando y agradeciendo a quien está en primera línea" frente a la crisis del coronavirus.

Con este propósito, El Pikón ha repartido un centenar de bocadillos en el Hospital Regional y en el centro de salud La Victoria, además de unas empanadas de carne y bacalao, así como dulces caseros, bebidas y fruta fresca. Según el propietario del negocio, Paul Petrica Negru, "es un pequeño granito de arena para agradecerles todo su esfuerzo".

"Este mes cumplimos el 12º aniversario de nuestro local pero dado que estamos cerrados por la situación actual hemos decidido celebrarlo de otra forma", explica Paul, quien además confiesa la difícil situación que están atravesando, con cinco empleados en plantilla y sin posibilidad de abrir por el momento. "Estamos bastante preocupados por la incertidumbre que tenemos sobre el futuro próximo".

El Pikón nació para cumplir el sueño de Paul, natural de Rumanía, que vino a Málaga para aprender el idioma aunque finalmente acabaría quedándose para siempre; tras tres años trabajando en la hostelería, se aventuró a montar su propio restaurante. El negocio abrió sus puertas en 2008, en plena crisis económica tras el estallido de la burbuja inmobiliaria. Tras el período de recesión estuvo a punto de echar el cierre en 2015, aunque según relata el propietario, "consiguieron remontar" y pasaron de dos empleados hasta los cinco actuales.

Por el momento, no han dejado pasar la oportunidad de celebrar estos años de esfuerzo, "muy duros pero también llenos de alegría", aportando "un mínimo" dada la situación excepcional que atraviesa el país. "Lo que sí tenemos claro es que estamos deseando volver a recibir a nuestros clientes, que son ya como de nuestra familia", exclama Paul Petrica Negru.