La centenaria fuente para los trabajadores del Puerto

Quizás porque no entra dentro del catálogo municipal y se encuentra en el ‘estado independiente del Puerto’, la página web del Ayuntamiento que informa de las fuentes de la ciudad no incluye una de las más veteranas de Málaga, pues precisamente este año cumple 120 primaveras.  

Está emplazada delante del jardincito del Instituto de Estudios Portuarios, después de haber sido trasladada unos metros, hace unos años, con motivo de las obras portuarias, pues a comienzos de este siglo se encontraba en otro jardincito muy próximo. 

La fuente, de estilo neoclásico, luce una inscripción que deja claro su origen y propósito: «En memoria del Sor. D. Juan Clemens Ramírez. Su viuda la Sra. Da. Juana Mac Culloch de Clemens ha hecho construir esta fuente para uso de los marineros y trabajadores del muelle. Año de 1903». 

Gracias al inmenso trabajo del investigador Manuel Muñoz y del elaborado por Raquel Conde para la Universidad de Málaga sabemos un poco más del personaje homenajeado de una forma tan bonita por su viuda. 

Era hijo del londinense Juan Clemens Young, que se dedicó especialmente al comercio de vinos y se casó con Dolores Ramírez. La pareja tuvo seis hijos y parece que Juan Clemens Ramírez fue el mayor y estudió en Inglaterra. 

El padre del homenajeado hizo negocios con las principales familias de la Málaga de la época y tan bien le fue que construyó una gran casa en la esquina de la Alameda Principal con la Alameda de Colón, por entonces de los Tristes, donde se criaría su hijo, hoy la parcela que ocupa el lustroso edificio del BBVA. 

En el callejero de Málaga permanece una pequeña operación urbanística realizada por el comerciante inglés en 1869, el bonito Pasaje de Clemens, junto a la calle Victoria, que originalmente estaba cerrado por una artística valla. 

A la muerte del progenitor en 1871 -está enterrado en el Cementerio de San Miguel y no en el Cementerio Inglés por lo que es muy probable que se hiciera católico pues inicialmente era anglicano- su hijo Juan, que nació en la década de 1830 o primeros años de la de 1840, continuó con los negocios familiares y sabemos que en 1903 ya no vivía. 

Antes de mudarse junto al Instituto de Estudios Portuarios la preciosa fuente compartía espacio en un jardincito con la escultura de una ninfa que recuerda mucho a la de la fuente de La Concepción. Todavía continúa en un emplazamiento parecido, junto al edificio de la Autoridad Portuaria. Sin duda, esta frágil criatura mitológica necesitaría una restauración. 

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