Junta y Diputación dan luz verde a un protocolo conjunto ante la sequía

Obtener 70 hectómetros más de agua potable de aquí a un año, de los que 20 estarían disponibles en verano, de ser necesarios. Es uno de los objetivos que se proponen Junta de Andalucía y Diputación de Málaga, tras haber firmado este mismo lunes un protocolo conjunto para hacer frente a la sequía que padece la provincia.  

El presidente de la Diputación, Francisco Salado, recibió en dependencias del organismo provincial a la consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía, Carmen Crespo, justo antes de suscribir un documento que pretende «mejorar aún más la coordinación entre ambas administraciones, acelerar los proyectos y su tramitación, así como prestar auxilio técnico, administrativo y financiero a los ayuntamientos».

El propio Salado abundó en un aspecto como la necesidad de que todas las administraciones «arrimemos el hombro más», así como «coordinarnos mejor y definir las líneas prioritarias de actuación para mejorar la seguridad hídrica de la provincia de Málaga, porque es un problema de Estado», alegó. Crespo recordó la importancia de mejorar las canalizaciones, porque «no se puede perder ni una gota». Así subrayó que el 16% del abastecimiento se pierde antes de llegar a los grifos.

Agregó la responsable autonómica que la Diputación se encargará de parte de las obras que comenzarán en enero, nada más aprobarse el cuarto decreto de sequía que va a poner en marcha la propia Junta. Una nueva desalobradora portátil permitirá en El Trapiche, en el corazón de la comarca de la Axarquía, aprovechar 4 hectómetros anuales más de agua mediante su tratamiento.

Reutilizar sondeos en desuso

También se reutilizarán sondeos en desuso que aportarán 2 hectómetros en el entorno Tejeda-Almijara, otros 10 en la zona de Aljaima, en Cártama, otros 10 en Coín y unos 6 en el entorno del río Guadiaro, en la provincia de Cádiz pero con posteriores aportes a la Costa del Sol más occidental.

Hasta 36 hectómetros cúbicos se prevén recibir de esos sondeos que hasta ahora no se usaban, incluyendo otros 8 procedentes de los existentes en Guadalmansa (Estepona) y en Fuengirola, mediante el uso de desalobradoras, según avanzó la consejera.