Historia

El conde de las Navas, un enamorado de las letras

Juan Gualberto López-Valdemoro y Quesada (1855-1931), V Conde de las Navas, nació en su palacio de la calle Beatas y fue novelista, historiador y académico de la Lengua

El palacio del conde de las Navas alberga hoy el Museo Interactivo de la Música (MIMMA).

El palacio del conde de las Navas alberga hoy el Museo Interactivo de la Música (MIMMA). / La Opinión

Antonio Lara Villodres

Antonio Lara Villodres

Uno de nuestros más ilustres y reputados hijos de esta ciudad fue el noble malagueño Juan Gualberto López-Valdemoro y Quesada. Nació en Málaga el 26 de septiembre de 1855 en un enorme caserón de la calle Beatas n.º 61 (el actual Museo Interactivo de la Música) y fue bautizado tres días más tarde en la iglesia de San Juan.

Era hijo de Norberto López Valdemoro y Ortiz, natural de Madrid y de Juana Gualberto de Pizarro y Quesada, quinta condesa del Donadío de Casasola, natural de Valencia, descendiente del gobernador de Málaga, el teniente coronel conde del Donadío, muerto por las turbas de la revolución del mes de julio de 1836.

A su vez era nieto por línea paterna de Felipe López Valdemoro Aguado y Alcántara y de María de los Santos Ortiz de Lazcano y Díaz de Halda.

El conde de las Navas. | ARCHIVO MUÑOZ MUÑOZ. BIBLIOTECA CÁNOVAS DEL CASTILLO.

El conde de las Navas. | ARCHIVO MUÑOZ MUÑOZ. BIBLIOTECA CÁNOVAS DEL CASTILLO.

Juan Gualberto contó entre sus ascendientes por línea materna, con la figura de su abuelo materno Luis Antonio Pizarro y Ramírez, tercer conde de las Navas, político diputado a Cortes en época de Isabel II y una de las figuras más destacadas del incipiente resurgir del republicanismo.

Fue personaje que sufrió, en ocasiones, el exilio por sus intervenciones contra la monarquía. Estaba casado con la ilustre dama lucense Juana Ramona Ramírez de Maldonado.

De su abuela materna María del Carmen Pizarro recibió el título de las Navas.

Bachillerato y Universidad

Siguiendo con la vida del joven noble, cursó sus primeros estudios de bachillerato en Málaga, en el Instituto de Segunda Enseñanza Vicente Espinel o Gaona así como en la ciudad cordobesa de Cabra, donde pasaba largas temporadas con su abuela materna

Posteriormente llevó a cabo estudios en la Universidad de Granada de Derecho Civil y Canónigo y los finalizó en la Universidad de Sevilla en 1876. Después de haber completado estos estudios ingresó en la Escuela Superior de Diplomática, en la que posteriormente ejerció como profesor y más tarde, lo hizo como catedrático de Paleografía y Diplomática española.

Con posterioridad fue nombrado profesor de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Central. En 1880 el rey Alfonso XIII le nombró su Mayordomo de Semana y le concedió la Gran Cruz de la Orden civil de Alfonso XII. Años más tarde, en 1893, el monarca le nombró su Bibliotecario mayor.

A la muerte de su madre la condesa del Donadío de Casasola, el mencionado título pasó también a heredarlo.

Posteriormente el mismo rey le concedió la merced de comendador de la Orden de Carlos III.

El condado del Donadío

Como podemos apreciar, el condado del Donadío de Casasola fue concedido a su antepasado el depositario general de la ciudad de Jaén, Francisco Ignacio de Quesada Vera y Ulloa, por el rey Felipe V, el 24 de mayo de 1713.

El palacio del conde de las Navas, en obras en 2010 para acoger el MIMMA. | CARLOS CRIADO

El palacio del conde de las Navas, en obras en 2010 para acoger el MIMMA. | CARLOS CRIADO

Siguiendo la línea histórica y genealógica de la antigua familia Quesada de Jaén, titular de esta merced, hay que indicar que procedía de Alonso de Quesada y Cárcamo, hijo del tercer Señor de Garcíez, poderosa casa en la provincia de Jaén.

El primer mayorazgo de la misma fue constituido en 1619 por Fernando Quesada y Ulloa y ampliado por su biznieto Francisco de Quesada y Vera en 1704, quien pasados unos años, como referíamos anteriormente, recibiría el título de conde del Donadío.

Posteriormente el mayorazgo fue incorporado a la poderosa casa de los Salazar, por su enlace matrimonial con Ana Jerónima de Salazar y Góngora hija de Jerónimo Matías de Salazar y Moncayo, corregidor de Baeza y regidor perpetuo de Málaga, Veinticuatro de Granada y de Juana de Góngora y Gadea.

En 1922 el conde de las Navas ingresó en la Real Academia Española. | A.V.

En 1922 el conde de las Navas ingresó en la Real Academia Española. | A.V.

Condado de las Navas

Y por otro lado, el título de Castilla de condado de las Navas, con el vizcondado previo de Capillar, lo fue para José Ramírez y Poblaciones Rico y Uribe, concedido por Carlos IV, el 2 de marzo de 1795. El conde fue Veinticuatro de la Real Cárcel de Salamanca, natural de Lucena (Cordoba).

El conde Gualberto a lo largo de su vida fue objeto de numerosas distinciones, empleos y cargos, entre ellos los de Jefe de segunda clase del Cuerpo de Correos.

Bibliotecario y bibliófilo eminente, fue miembro de honor del Ateneo de Madrid, de la Sociedad de Amigos de Portugal y del Centro de Acción Nobiliario, además de socio fundador de la Unión Iberoamericana, vicepresidente de la Sociedad Nacional de Avicultores Españoles -de la que fue un verdadero experto- académico de la Lengua y de las Buenas Letras de la ciudad de Sevilla, socio de Honor de la Asociación de Empleados de Librerías, académico de la Real Academia Española en 1922 y por último, Hijo predilecto y esclarecido de Málaga. El título le fue otorgado por pleno de 20 de mayo 1925 por el Ayuntamiento de Málaga, siendo su alcalde el doctor José Gálvez Ginachero.

Historiador y novelista

Por otro lado, el conde Juan Gualberto fue un culto historiador y ameno novelista. Un autor nos dejó numerosas obras literarias de muy diferentes estilos.

De su prolífica actividad podemos destacar las siguiente: el ‘Catálogo de la Real Biblioteca’, ‘La noticia de algunas bibliotecas de los Reyes de España’ un verdadero estudio psicológico de los monarcas españoles a través de sus lecturas., ‘El espectáculo más nacional’ obra calificada como un verdadero estudio de tauromaquia por don Juan Valera.

Juan Gualberto López-Valdemoro y Quesada estudió en el Instituto Gaona. | EFE

Juan Gualberto López-Valdemoro y Quesada estudió en el Instituto Gaona. | EFE

Igualmente diversos estudios bibliográficos entre ellas cabe mencionar el volumen titulado ‘De Libros’, ‘Las tres novelas’, ‘La niña Araceli’, ‘Chavala’ y el ‘Procurador Yerbabuena’. Escribió para Barcelona y Madrid en revistas y diarios como ‘EL Liberal’, ‘El Principado’, ‘La Dinastía’, ‘El siglo XX’, ‘El Eco de Barcelona’ o ‘Pluma y Lápiz’.

Doblemente noble por nacimiento y por sus meritorias obras, el conde de las Navas fue una de las personalidades más castizas y beneméritas de la España contemporánea.

En sus contadas apariciones por su ciudad natal, debido a sus muchos empleos y responsabilidades en la capital del reino, gustaba de las reuniones literarias con amigos y contertulios de la Academia de Letras Humanas de Málaga, de la que fue miembro desde 1906.

Se casó en Madrid con Manuela de Fesser y Fesser con la que tuvo a su hija María Felisa, quien seguiría en el título como sexta condesa de las Navas y séptima del Donadío de Casasola.

Juan Gualberto López-Valdemoro y Quesada, nuestro benemérito malagueño falleció en Madrid a la edad de 80 años, el 28 de abril de 1935. En el Madrid de aquellos días, la prensa se hizo eco de la noticia de tan estimada pérdida, y difundió en algunos periódicos la virtudes literarias y personales del ilustre conde.