El proyecto del Parque Empresarial de Marbella en la zona de la Serranía comienza a tomar forma. El pleno ordinario celebrado ayer en el Ayuntamiento marbellí aprobó el avance del Plan General que va a ordenar el territorio.

El objetivo es acondicionar un espacio junto a la zona de La Cañada dedicado a la actividad industrial al que se trasladarán todas las empresas que forman el polígono La Ermita, situado en la entrada este de la ciudad.

En un principio, el área contaría con una amplia zona verde de alrededor de 506.000 metros cuadrados y no se descarta la posibilidad de modificar el Plan General de Ordenación Urbana para darle también un uso residencial. «Se puede hacer una modificación para no crear un espacio fantasma y que se pueda habitar aunque siempre primará la actividad industrial», señaló el edil de Urbanismo, Pablo Moro.

Dentro del desarrollo de este sector se contempla también la creación de una vía de conexión directa entre las zonas norte y sur de Marbella, a través de un eje que unirá la carretera de Ojén con La Bajadilla.

Nuevo Palacio Real

Por otra parte, la ciudad contará con un nuevo palacio real. El pleno corporativo aprobó ayer una modificación puntual del PGOU de Marbella relativa a la Finca Alkhaldía en la Urbanización Lomas de Marbella, para desarrollar un nuevo proyecto de construcción de este espacio.

Junto a la residencia real del Rey Fahd se va a situar esta edificación promovida por un ciudadano sirio que además reservará 29 viviendas para su séquito.

La parcela de este nuevo palacio cuenta con más de 42.500 metros cuadrados y fue calificada ayer como construcción «unifamiliar exenta palacio real».

En esta misma línea, en el pleno de ayer también se procedió a la aprobación provisional de modificación puntual de elementos del PGOU relativa al hotel Escuela Bellamar.

Este edificio emblemático de la ciudad ha albergado desde los años 60 la formación más antigua de la provincia en el sector turístico y hostelero. La construcción que es propiedad privada de una familia marbellí, va a pasar a ser municipal gracias a un acuerdo entre el Consistorio y los dueños actuales. Los propietarios cederán al Ayuntamiento el suelo y el edificio del centro de formación que, a su vez, lo cederá al Servicio Público de Empleo Estatal para que lo dote de contenido.