La Mancomunidad de la Costa del Sol aprueba una subida del 77 % de la tasa de residuos sólidos

La Asamblea de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental aprobó ayer una subida del 77 por ciento de la tasa que cobra a los ayuntamiento de la comarca por tratar sus residuos sólidos en el Complejo Medioambiental, ubicado en Casares, y en las plantas de transferencia.

El tributo pasa de los 48 euros por tonelada de basura a cerca de 86 tras la revisión que contempla la Ley de Economía Circular, del Gobierno central, que incorpora una directiva de la Unión Europea.

Los consistorios de la comarca tendrán que decidir si asumen el incremento de la tasa o los repercuten en sus vecinos.

El objetivo de la ley «es reducir al mínimo los efectos negativos de la generación y gestión de los residuos en la salud humana y el medio ambiente, teniendo en cuenta el uso eficiente de los recursos. Todos los ayuntamientos deben aplicar esta subida ya que hay que cumplir la Ley de Residuos de Suelos Contaminados que, a su vez, incorpora la Directiva marco de residuos de la Unión Europea», señaló el delegado de Medio Ambiente de la Mancomunidad, Juan Olea.

El ente mancomunado confía en que la subida sirva para que los vecinos de la Costa del Sol se conciencien más de la importancia de separar los residuos en origen, ya que los municipios pagarán más cuantos más residuos trasladen al vertedero, un emplazamiento en el que sólo terminan los restos que no se pueden reutilizar.

La ley se basa en la premisa de quien contamina, paga; por lo que establece un sistema de pago que se basa en la generación real de basura de cada ciudadano y su grado de participación con incentivos en el caso de que se recicle adecuadamente o se genere menos residuos.

Por lo tanto, si los ciudadanos separan correctamente los residuos en sus contenedores adecuados -envases a los amarillos; papel y cartón a los azules; vidrios a los verdes; y los restos orgánicos, a los marrones- sólo el contenido de lo que quede en los grises terminará en el vertedero y se reducirán los costes.

La implantación de un quinto contenedor, de color marrón y que servirá para depositar la basura orgánica, contribuirá a reducir los residuos que se llevan al vertedero, además de disminuir las emisiones de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero implicados en el cambio climático.

Los residuos orgánicos generados en el hogar que se depositen en los contenedores marrones se destinarán a la elaboración de compost para utilizarlo como abono, fertilizante o fuente de generación de energía.

Por otra parte, la Mancomunidad aprobó la creación de la Medalla de Honor de la Costa del Sol, el más alto reconocimiento de la institución para distinguir servicios extraordinarios en la comarca de personas o entidades.