Las naves industriales que se encuentran junto al nudo ferroviario de Bobadilla Estación se edificaron para funcionar como Centro Integral de Servicios Ferroviarios, un laboratorio de experimentación y estudio de los trenes de alta velocidad que discurrirían por el anillo que se iba a construirse en la comarca de Antequera.

Sin embargo, aunque su construcción se inició en 2011 y se finalizó en 2013, las instalaciones permanecen a día de hoy cerradas a cal y canto tras una inversión de unos 13 millones de euros y después de que el proyecto del circuito experimental fracasara definitivamente.

El alcalde de Antequera, Manuel Barón (PP), se reunirá el próximo 18 de abril con el presidente de la entidad pública Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF), Juan Bravo Rivera, para buscar un uso alternativo a estas naves industriales, que cuentan con una superficie total de 19.140 metros cuadrados. Así lo dio a conocer el regidor durante el desarrollo de la sesión plenaria correspondiente a marzo en el Consistorio de la ciudad.

Ahora, cancelado el proyecto del anillo de pruebas, el Gobierno local va a proponer que su uso se vincule sobre todo al futuro Puerto Seco de Antequera, según dio a conocer el munícipe en el pleno. «La solución no puede ser derribarlas», indicó Barón, quien espera que en próximas fechas se anuncie por parte de la Junta de Andalucía que ya está aprobado definitivamente el Plan Especial de la infraestructura logística que se va a desarrollar en la zona.

El alcalde dio a conocer el encuentro que tendrán con el responsable de ADIF tras el rechazo de la Cámara antequerana a la moción del grupo municipal socialista para instar al Gobierno central a la «puesta en funcionamiento inmediata» de las naves, dándoles «otros usos alternativos, pero que estén relacionados con la innovación y el desarrollo tecnológico», según expuso el concejal Manuel Chicón en la sesión.

A juicio del edil socialista, estas instalaciones deben servir de «palanca de cambio» para el fomento del sector ferroviario en el municipio. El argumento no convenció ni al grupo popular ni al de Izquierda Unida para contar con su respaldo.

Según el portavoz del PP, Ángel González, las naves se hicieron para vender el anillo ferroviario y, de paso, salvar el compromiso de empleo de los socialistas cuando gobernaban en el Ayuntamiento antequerano. El portavoz de Izquierda Unida en Antequera, Fran Matas, añadió que la moción se presentó para «salvar las vergüenzas» del PSOE respecto al proyecto.

En Izquierda Unida sí están de acuerdo en que se les busque otros usos a las naves, pero no comparten que la moción indique el sector económico para el que deben ser empleadas, ya que entienden que es ADIF el que debe determinar su uso.

Según Barón, apostar por la vinculación de las instalaciones al Puerto Seco puede ser la mejor opción, ya que le daría a este proyecto un «carácter de internacionalización». Cuatro años después las naves continúan cerradas.