Amor y Maristas, una vinculación más allá de las aulas

El lema del Colegio Maristas en Málaga es "Más que aulas" y en la vinculación que mantiene con la cofradía del Amor este lema se cumple de forma excepcional. Son muchos los alumnos y profesores que están en esta cofradía victoriana, empezando por el propio director del centro, Federico Fernández-Basurte. También hay alumnos, muchos de ellos jóvenes, que se han integrado en sus filas nazarenas. Alba lleva desde los dos años saliendo en el cortejo y ahora, con casi 9 años está con los monaguillos organizando el reparto de estampas de la Virgen de la Caridad. Paloma y Victoria, de primero de Bachiller, se estrenaban como nazarenas en el cortejo del Amor, una primera experiencia saliendo en procesión que afrontaban con ilusión, como su padres Eva y Miguel. Javier Vives, entrenador de baloncesto y profesor de Historia en el colegio es portador del Cristo del Amor. Por otro lado, la Seño Carmen, de Infantil, comentaba que tiene a muchos alumnos entre los más pequeños de la hermandad que van abriendo el cortejo de la Virgen de la Caridad, a los que visitó cuando pasaban por la calle Victoria y repartió chuches...

Los ejemplos pueden seguir, pero esta unión no es algo nuevo. Surgió en los años 40 y se reverdeció en los 70 cuando alumnos del colegio de incorporaron como hombres de trono sin pagar. Pero no es sólo el colegio el que aporta, la cofradía incorpora el emblema de las tres violetas maristas en su guion, de porta la bandera con el escudo marista y dos cartelas del trono tienen a San Marcelino y la Buena Mader y a la Virgen del Hermitage.

Amor | Viernes Santo 2023

Esto explica por qué el paso frente a la fachada del Colegio Maristas tiene algo de especial para esta hermandad el Viernes Santo. Un grupo de seis alumnos de 3º de ESO y antiguos alumnos protagonizaron las lecturas y oraciones que se fueron realizando al paso del cortejo, en especial cuando el Cristo del Amor y la Virgen de la Caridad pasaron por la puerta, recibiendo una ofrenda floral del colegio. En la puerta y las ventanas había una nutrida representación de la comunidad educativa del colegio, acompañando además al busto de San Marcelino Champagnat, que se sacó al dintel del colegio. Fue un acto sencillo y participativo, que volvió a recordar que el Colegio Maristas es "Más que aulas" y que la cofradía del Amor es "Más que una cofradía".

Salida en Fernando El Católico

La salida de esta cofradía desde su casa hermandad es exigente. La calle Fernando El Católico es estrecha y los tronos, entre los mayores de este Viernes Santo, requieren de una dirección exacta para poder completar la maniobra. Además, hay un tramo en el que la calzada se estrecha por una parada de autobús y obliga al varal H a ir descompensados respecto al resto de los varales.

El trono de Cristo lo hizo con la marcha "Cristo del Amor", como no podía ser de otra forma, con una Banda de Cornetas y Tambores de la Esperanza a la que el cansancio de toda la Semana Santa parece que no le afecta. Tras el acto junto al Colegio Maristas el trono continuó con su camino para encontrarse con Málaga al ritmo de la marcha "Santa Caridad, Christus Charitas Est", de Alberto Zumaquero, que sonó con fuerza en la calle Victoria anunciando al resto de Málaga que el Amor iba a recorrer sus calles.

La Virgen de la Caridad salió, al igual que el Cristo, con una marcha dedicada a su advocación: "Virgen de la Caridad", de Francisco Martínez, para continuar con "Música para una Madre", de Eloy García, interpretadas por la Banda de Música Eloy García, en su bajada por Fernando El Católico. Destacaba en su pecho el corazón agustino, fruto de los orígenes agustinos de la hermandad, que están presentes en los hábitos nazarenos.