El músico malagueño se plantó el miércoles en la puerta del Ayuntamiento de Málaga a las 6 de la mañana para inciar la huelga de hambre que el martes ya anunció en sus redes sociales. Con el objetivo de reivindicar la situación 'insostenible' por la que está pasando este sector de la música en directo, Mario Salazar la suspendió el viernes por la tarde tras el compromiso municipal de buscar soluciones.