Los sanitarios no pudieron hacer nada por salvar la vida de Ryan. Sufrió un paro cardiaco y se desplomó junto a la boca de metro. En su cuerpo encontraron restos de droga y la policía investiga si la tomó voluntariamente o fue engañado, como aseguran en su entorno. Su familia cree que le echaron algo en la bebida, pero los menores que acompañaban a Ryan han dado otra versión: que sí sabían que había droga en la lata. El análisis de tóxicos dirá qué sustancia tomó y qué cantidad. Si se confirma que fueron dos gramos de cocaína rosa estaríamos ante una dosis letal. Su familia insiste en que Ryan nunca había tomado drogas y que esa tarde no se gastó el dinero que llevaba encima, solo pagó la lata que se estaba tomando.