La Junta de Andalucía reunirá la próxima semana a los portavoces agrarios de la provincia para revisar las restricciones al regadío que en la comarca de la Axarquía mantienen acotado el abastecimiento a variedades como los subtropicales desde la Semana Santa de 2017.

Todo apunta a que se podrían reducir hasta en un 75% las medidas que se mantienen desde el pasado año, debido a que los embalses de Málaga ya acumulan 314 hectómetros cúbicos y el embalse de la Viñuela, enclavado en el corazón de la comarca oriental, ya ha pasado a estar por encima de un tercio de su capacidad, como justifican los propios agricultores tras el encuentro que este miércoles han mantenido en Vélez Málaga con el consejero de Medio Ambiente, José Fiscal.

No obstante, colectivos como Asaja Málaga se han mostrado cautos con lo que planea la administración autonómica y han recordado que con el alejamiento del decreto de sequía hasta después del verano lo importante es "al menos concluir las obras previstas y todavía no ejecutadas". Así lo indicó el responsable axárquico de dicho sindicato agrario, Benjamín Faulí.

"Están pendientes obras anunciadas desde hace años, como la conexión de los pozos del río Chíllar, en Nerja, con las canalizaciones del embalse de la Viñuela que llegan hasta el límite de este municipio con Torrox", alega Faulí. Ahora los campesinos dudan de la palabra de los máximos dirigentes autonómicos y la próxima semana solicitarán por escrito "un calendario de actuaciones, con las fechas exactas para no seguir esperando indefinidamente que las obras sean ejecutadas".

Alegan los agricultores que variedades como los subtropicales, con facturaciones que se elevan por encima de los 300 millones de euros brutos al año, aportan lo suficiente a la economía malagueña y andaluza como para merecer a cambio pequeños esfuerzos en mejora de las canalizaciones hídricas. Recuerdan que incluso los ciudadanos pagan una tasa por agua que luego no reporta las inversiones que en su día se prometieron, justo cuando se pusieron en marcha.