El caso de la supuesta violación que finalmente ha quedado archivado tras quedar acreditado que la relación sexual fue consentida podría perjudicar a otros que sean reales, pues muchas de las víctimas de violaciones no denuncian por miedo o vergüenza.

Así lo cree la psicóloga clínica y terapeuta sexual Ángeles Castillo, miembro del Colegio de Psicología de Andalucía Oriental, que cree que este tipo de casos fomenta que muchas personas lleguen a consultas de psicología con un trauma de cinco o diez años. «La mayoría de la gente se calla», admite la profesional.

Castillo asegura que ante el caso de una violación siempre hay que reaccionar con sensibilidad y nunca juzgarla. «Hay que hacerle entender que ella no tiene la culpa, que nada es suficiente para que te violen», dice la psicóloga, que afirma que hay que respetar su vergüenza, su miedo y su dolor, además de darle tiempo para que reaccione a su ritmo. Ángeles Castillo afirma que un 70% de las víctimas de abusos sexuales presenta estrés postraumático, que puede durar años en caso de no ser tratado a tiempo. Y es que además de tener sensaciones como ansiedad, problemas para conciliar el sueño o incluso trabajar, la gran mayoría tiene secuelas sexuales que suelen marcarle en sus relaciones íntimas posteriores.

La psicóloga, que además es sexóloga, admite que lo mejor es volver a la vida diaria lo antes posible además de establecer un plan de autocuidado. Además, es fundamental tratar las secuelas psicológicas para evitar que el problema no sane.

El caso sigue teniendo eco en las redes sociales, donde se ha extendido el uso de la etiqueta #NoestásSola para mostrar, por un lado, la solidaridad con esta denunciante y con las víctimas de agresiones sexuales y, por otro, denunciar los mensajes machistas.