­El otoño ha llegado con fuerza a Málaga al menos en lo que a lluvias se refiere. Las primeras y esperadas precipitaciones de la temporada han dejado este fin de semana acumulados de más de cien litros por metro cuadrado en algunos puntos de la provincia, al tiempo que han provocado algunos destrozos en aquellos municipios donde el agua cayó con más virulencia en la madrugada del sábado al domingo.

En la provincia, se registraron incididencias en localidades como la capital, Fuengirola, Marbella, Ronda, Torrox y Mijas. Esta última fue una de las que más problemas tuvo a causa de la lluvia y el Ayuntamiento se vio obligado, incluso, a activar el plan municipal de emergencias para coordinarse con los bomberos y las fuerzas de seguridad en caso de urgencias.

En la localidad mijeña, dos personas quedaron atrapadas en un vehículo a consecuencia de la subida del nivel de agua en el Camino Viejo de Coín, punto en el que varias zonas quedaron anegadas, mientras que en Las Lagunas el agua entró en varias viviendas, según recogió ayer la agencia Efe.

En Marbella, sobre las 3.15 horas entró agua en un camping, aunque el nivel descendió poco después, y en Fuengirola la intensa lluvia dejó varias vías anegadas en la madrugada del domingo, entre ellas la calle Miguel de Cervantes.

En la capital malagueña se vieron sorprendidos por la lluvia varios conductores, uno en la avenida de Europa y otro en el polígono Guadalhorce.

Las precipitaciones ocasionaron, asimismo, inundaciones de sótanos y bajos de viviendas y establecimientos comerciales y balsas de agua en las carreteras.

Así, el servicio de emergencias 112 aseguró ayer que las fuertes lluvias habían provocado más de sesenta incidencias en la provincia, con Mijas y Marbella como los puntos más afectados. De hecho, hasta el mediodía de ayer estuvo activa la alerta naranja en las comarcas de la Axarquía, el Valle del Guadalhorce y la Costa del Sol, mientras que en Ronda estuvo en alerta amarilla.

La Serranía fue, precisamente, una de las comarcas con más precipitaciones. En la localidad de Pujerra, la que más lluvia acumuló entre el sábado y el domingo, se registraron más de 136 litros por metro cuadrado en la suma del fin de semana. En Jubrique las precipitaciones acumuladas se quedaron al filo de los 100 litros, mientras que en Ronda se contabilizaron hasta 70 litros, con mayor fuerza el sábado, que sumó 50 litros.

Torrox también llegó a los 70 litros, al tiempo que Mijas llegó a los 80 litros y en puntos del Guadalteba como Ardales se registraron cuotas similares. La capital se quedó en cifras cercanas a los 40 litros, mientras que otras localidades como Coín llegaron a los 50.

Año hidrológico Estas primeras lluvias, aunque contundentes, no son suficientes para que la provincia comience el otoño con cifras positivas, ya que la falta de precipitaciones del último año ha hecho que Málaga se quede muy por debajo de la media y vaya a cerrar el año hidrológico mañana como el segundo más seco de su historia, según las previsiones avanzadas la pasada semana por la Aemet a este periódico. A falta de sumar las precipitaciones de este fin de semana, la previsión era que la provincia cerrara el año hidrológico con una media 182,9 litros por metro cuadrado, la segunda más baja después de la temporada del año 94-95, en plena sequía, con 140,3 litros acumulados.

A nivel nacional, la media de ese año se quedará en 605 litros por metro cuadrado, un valor un 5% de las cifras habituales, según la Aemet.

Los embalses de la provincia malagueña suman 411 hectómetros cúbicos en la actualidad, cifra que está por debajo de la registrada el año pasado (534). No obstante, la falta de precipitaciones no afecta al abastecimiento, ya que las reservas están al 66% de su capacidad, según datos de la Junta de Andalucía.

Para esta semana, las previsiones apuntan a que se mantendrá la inestabilidad, con entre un 30 y un 40% de posibilidades de lluvia a partir de mañana martes, porcentaje que podría aumentar a medida que se acerque el fin de semana. Hoy, hay escasas probabilidades y máximas de 28 grados.