­El hombre detenido por la brutal agresión a la empleada de un salón de juegos durante una atraco ya ha ingresado en prisión por orden del juez, que, según fuentes del Tribunal Superior de justicia de Andalucía, le ha imputado un presunto delito de asesinato en grado de tentativa. Al igual que los investigadores, la autoridad judicial considera que el arrestado, de 37 años y nacionalidad china, intentó acabar con la vida de la mujer golpeándola antes y después de llevarse el dinero de la caja y producirle un traumatismo craneoencefálico severo por el que todavía se encuentra en la UCI. Como prueba más irrefutable de los hechos, los agentes aportaron a las diligencias las imágenes de las cámaras de seguridad del establecimiento, un escalofriante vídeo que obligó a los investigadores a hacer de tripas corazón para verlo hasta el final.

La grabación, según ha podido saber este periódico, refleja dos series de golpes. Un primer ataque en el que los agentes contabilizan hasta setenta impactos, varios de ellos en la cabeza, de los que la empleada se protege como puede y una segunda serie no cuantificada que le propinó después de coger el dinero, cuando la víctima ya se encontraba inconsciente e indefensa en el suelo. Las imágenes también revelan que el atracador actuó después de tomarse una consumición en el establecimiento, localizado en la esquina de la calle Chico del Matadero con la avenida de Velázquez, en plena Carretera de Cádiz. La versión oficial explica que el hombre esperó a quedarse solo en el establecimiento, momento en el que se dirigió al baño y salió del mismo con el martillo en la mano para ejecutar el ataque sin mediar palabra con la mujer. Con el botín en sus manos, antes de huir, volvió a golpearla.

Eran las 16.10 horas del viernes cuando la Sala del 091 activó el protocolo de este tipo de atracos tras recibir una llamada que informaba de la comisión de un robo con violencia en un salón recreativo en la Carretera de Cádiz y que en su interior había una mujer inmóvil en el suelo e inconsciente. Mientras la mujer era ingresada en Carlos Haya con un traumatismo craneoencefálico severo por el que los médicos le indujeron el coma, las áreas de Seguridad Ciudadana, Policía Judicial y Policía Científica de la Comisaría Provincial de Málaga coordinaron un operativo conjunto que pronto permitió identificar al sospechoso como un ciudadano de origen chino de 37 años y posteriormente detenerlo en su domicilio.

Según las fuentes consultadas, la colaboración de la comunidad china residente en la capital resultó determinante para la rápida resolución del caso. Sobre las 22.30 horas, apenas seis horas después del asalto, el hombre fue arrestado en su residencia, localizada en el distrito de Churriana. Durante el registro domiciliario, los investigadores intervinieron 2.800 euros en efectivo y diferentes prendas que coincidían con las utilizadas en el asalto.