La discusión en el pleno de la moción sobre La Cónsula puso en un apuro a la portavoz socialista, María Gámez. Con el salón de plenos repleto de estudiantes de la escuela que le gritaban a la concejala socialista: «María, da la cara», «María, danos explicaciones», «María, no te escondas», la portavoz guardó silencio y dejó que fuera Francisca Montiel, una concejala que Gámez no ha incluido en la lista para las próximas elecciones, la que diera la cara. Montiel sorteó el papelón que le tocó como pudo. Al iniciarse el segundo turno de palabra los estudiantes volvieron a arreciar en sus gritos para que Gámez interviniese, pero la portavoz volvió a refugiarse en el silencio mientras Montiel tuvo que volver a torear un toro que no era el suyo.