­La cooperativa andaluza Cofarán, que nació en Málaga hace cincuenta años, estudia integrarse junto a otras cooperativas para constituir una de gran tamaño que supondría el 25% del volumen de mercancías farmacéuticas del país.

El presidente de Cofarán, Leandro Martínez, anunció en el acto de clausura del 50 aniversario de la cooperativa que la empresa, que en unos inicios tenía 17 socios y 15 trabajadores -muy alejados de los 800 cooperativistas de hoy y 200 empleados- ha decidido no quedarse con el recuerdo de lo que se hizo entonces e ir más allá. «Queremos hacer un proyecto de cooperación con el que se crearía una gran cooperativa nacional. El proyecto ha sido muy bien acogido por la mayoría de socios, la distribución farmacéutica debe ir de manos de la concentración para dar un buen servicio al ciudadano», apuntó.

Martínez anunció que se han iniciado unos estudios que espera que estén listos para marzo y que, de este modo, las asambleas voten en los meses de junio y julio del año que viene. «Serán los socios quiénes decidan si el proceso sigue adelante o no. Pero tengo ilusión, creo que saldrá adelante, el sector necesita ser competitivo con las multinacionales de la UE y con el tratado de EEUU y de la UE con el que se tendrán que aplicar nuevos conceptos en la sanidad», dijo. Aprovechando la visita del consejero de Salud, Aquilino Alonso, al acto, Martínez le recordó que la sanidad es, junto a la educación, el bien más preciado del sistema español, por lo que esperó que se sigan manteniendo como claves.

En lo que respecta a los tiempos para la creación de la gran cooperativa en caso de que los socios de las integrantes digan que sí, el presidente de Cofarán señaló que al día siguiente de la votación se empezaría a trabajar buscando la mejor de las eficiencias aunque no sería hasta un año después cuando funcionasen todos los procesos en aquellos lugares del país donde se implantaría.

Las cooperativas que formarán esa gran cooperativa nacional, de aprobarse, serían las que actualmente integran el grupo Farmanova, una cooperativa de segundo grado que no está fusionada. Las integrantes son las distribuidoras de Málaga, Granada, Jaén, Almería y Jerez, junto a las de las Gran Canaria, Tenerife, Baleares y Cáceres. Este grupo, que controla el 14% de la cuota nacional, tiene la intención de sumarse a Cecofar, de Sevilla, que posee el 10%.

Por su parte, el consejero de Salud apuntó en su visita a Cofarán que esta empresa, creada en el año 1965 por un grupo de amigos farmacéuticos que decidieron dar un paso más allá y crear una cooperativa con la que manejar un gran stock de medicamentos, es un ejemplo de la distribución farmacéutica en Andalucía. «Quiero aprovechar el momento para recordar el papel fundamental del modelo de la farmacia andaluza en el sistema sanitario público. Venir aquí y reconocer el tiempo que llevan trabajando y que tengan previsto nuevos crecimientos a corto plazo que haría crear una nueva empresa en Andalucía y extenderse al resto de España e incluso hacerlo fuera de las fronteras», dijo Alonso, que recordó que las farmacias en la comunidad autónoma tienen una característica fundamental: que la distribución llegue cada día a las farmacias más alejadas, dando así un verdadero servicio a la comunidad y al sistema sanitario. «Son agentes sanitarios cercanos a los ciudadanos, incluso en los lugares más alejados de la geografía son los que acercan los medicamentos a los ciudadanos, es vital», dijo el mandatario de Salud en Andalucía, que recordó, asimismo, que también asesoran y dan consejos a la población, lo que evidencia que con un modelo diferente al andaluz sería mucho más complicado llegar a esos sitios peor comunicados o más lejanos en la orografía de la comunidad autónoma andaluza.