­Las protestas del Unicaja han llegado a buen puerto. El club de Los Guindos se dirigió hace una semana a Movistar Plus para tratar de cambiar el partido de Andorra, dentro de un par de semanas. El equipo jugará el viernes por la noche en Bamberg y deberá jugar el domingo a las 13.00 horas frente al Andorra, con tiempo sólo de viajar y casi ni de entrenar.

El club trató de mover ese partido, para que se pusiera en la tarde del domingo, día 22 de noviembre. Ahora, sí que le han hecho caso. El Unicaja jugará el viernes 18 de diciembre en Moscú, un viaje muy largo y pesado. Y su encuentro liguero lo jugará el domingo por la tarde, en Zaragoza frente al CAI, día 20 a las 19.30 horas. Es el «Partidazo» de la semana. Una mañana de descanso y algo de tiempo para preparar el encuentro ante un rival que siempre es muy peligroso.

La semana siguiente ya no habrá Euroliga, y la ACB lo aprovechará para apretar el calendario y tratar de que en las fiestas de Navidad, con los niños sin colegio y más tiempo libre para todos, haya partidos. Justo tras jugar ante el CAI, el domingo por la tarde, el Unicaja se montará en un avión para viajar a Las Palmas de Gran Canaria y jugar, el martes 22, a las 21.30 horas, ante el Herbalife.

La siguiente salida del Unicaja, en el primer encuentro liguero del año 2016, será en Valencia, y también será el «Partidazo», el domingo día 3 a las 19.30 horas.