La concejala del área de Personal, Pilar Fernández-Fígares, y el edil del área Económica, Manuel Aguilar, han anunciado hoy que el equipo de gobierno mantendrá esta tarde la primera de las reuniones de negociación con los sindicatos para abordar las medidas incluidas dentro del plan de ajuste necesario para pagar la deuda a proveedores. Ambos se han mostrado confiados en llegar a un acuerdo con los representantes de los trabajadores en los encuentros que desde hoy tendrán lugar para abordar este asunto.
Aguilar ha ratificado hoy que el equipo de gobierno mantendrá en todo momento la postura de que los impuestos de la localidad no se van a aumentar porque los ciudadanos no pueden ser quienes paguen la mala gestión y el descontrol que ha existido en los últimos años de gobierno. Con esta premisa, el Ejecutivo local está dispuesto a negociar las medidas a adoptar para ahorrar seis millones de euros en el gasto que supone la plantilla.
Al respecto, ha aclarado que esta cuantía de ahorro -fijada dentro del plan de ajuste necesario para pagar a proveedores- es indispensable para equilibrar el presupuesto municipal y eliminar el déficit estructural que existe entre los ingresos y los gastos, condición necesaria para poder optar al crédito del pago a proveedores por una cuantía de más de 63 millones de euros.
En este punto, el edil ha aclarado que "no serán los trabajadores quienes paguen la deuda con los acreedores, ya que ésta se saldará con la enajenación de bienes municipales". Sobre este asunto, el responsable del área Económica ha cuantificado que el gasto de la plantilla supone más del 90% de los ingresos municipales y que "ninguna empresa sostenible puede alcanzar este coste".
"Las empresas municipales se convirtieron durante años en una oficina de contratación y parece que ni los políticos de turno, ni siquiera los sindicatos, que ahora muestran su rechazo y que deberían haber defendido la posibilidad de cobro de los trabajadores, criticaron estos excesos", ha asegurado Aguilar, que ha recordado que el anterior equipo de gobierno no dejó garantizado el pago de las nóminas de los empleados municipales.
Para Aguilar, "el Ayuntamiento no puede seguir asfixiando al pueblo por los despropósitos del anterior alcalde, cuya tónica era gastar y no pagar a los proveedores; este plan de ajuste viene de años de despilfarro y estos problemas se los debemos a los años desde 2003 y 2011". El responsable del área Económica ha cuantificado que el 99,96% de la deuda de los 63 millones que se van a pagar a proveedores procede del gobierno socialista que ha gobernado desde 2003 y que el 56% de la totalidad de la misma corresponde a los últimos tres años de gestión.
El concejal ha enumerado que el gobierno local lleva casi diez meses haciendo sus deberes con el desarrollo de iniciativas destinadas a contener el gasto, reducir costes y mejorar los ingresos, sin aumentar la presión fiscal. Así, ha recordado que el equipo de gobierno llevó a cabo acuerdos con los sindicatos para modificar los convenios colectivos que permitieron un ahorro de unos 3,5 millones de euros anuales, sin recortar las retribuciones salariales. Asimismo, ha señalado que la disolución de la totalidad de las seis sociedades municipales y la integración en el Ayuntamiento de la plantilla que prestaba servicio en las mismas supuso un ahorro solo en cotizaciones a la Seguridad Social de 286.917 euros anuales. A esto se suma la reducción en los cargos de confianza respecto al anterior mandato, lo que ha supuesto un ahorro de 300.000 euros anuales.
Aguilar ha argumentado además que el plan de pago a proveedores no solo van a racionalizar el gasto sino que posibilitará el crecimiento económico ya que va a permitir que "sigamos evolucionando y ofreciendo cada vez mejores servicios a los ciudadanos".
