El microcosmos personal que se hace mundo en cada obra de arte es un reguero de criaturas únicas que vuelan libres ante la mirada del espectador. Y, si a alguien le quedaba alguna duda de que los seres nacidos en la imaginación del creador no están dentro de una jaula, el dilema se resuelve a golpe de certeza al recorrer la exposición 'Seis personajes en busca de autor'.
Espoleados por una aparición similar a la que envolvió a Pirandello, en el Archivo Municipal de la capital malagueña han irrumpido el joker de Chema Cobo, los niños héroes de Javi Calleja, las ratas y los conejos de Chema Lumbreras, las 'poupees' de Mari García, y El vecino de Pepo Pérez en connivencia con Carlos 'Polaroid Star' Miranda.
Pinturas, esculturas e instalaciones de estos seis creadores malagueños nutren un recorrido ideado por las comisarias Lorena Codes y Marta del Corral en el que el joker que persigue a Chema Cobo desde los vertiginosos años 80 se abona al epicentro y con su pistola se encomienda con disciplina castrense a la misión de guardián del deseo necesario que le encomienda su título. Tanto en esta escultura como en sendas pinturas vecinas, este personaje sacudirá con una llamada de atención al público para que se sienta libre. "Hace 20 años que Chema Cobo ya nos advertía que 'cuando lo veas todo, no verás nada' y no puede resultar más actual", recordaron Lorena Codes y Marta del Corral refiriéndose a planteamientos artísticos con cierto cariz visionario.
Más allá de este trance iniciático, los niños superhéroes de Javi Calleja se sugieren en otra simbiosis de pintura y escultura ante la que se aprecia la evolución de la obra de este creador, gracias a la presencia de alguna muestra de sus aportaciones más recientes. Si se siguen las impresiones con las que Calleja se refiere al sentido de su propuesta, "cualquier niño que ha dejado de llorar es un pequeño héroe". "Desde ellos puedo hablarle al mundo y jugar con el espectador", recalca el artista.
El sentido lúdico de estas piezas contrasta con el juego que, al otro extremo, se plantea en clave más profunda y compleja entre el cómic de Pepo Pérez y la pintura de Carlos Miranda. Fue, precisamente, este último quien embutido en su alter ego Polaroid Star captó como un voyeur imágenes de El vecino, el superhéroe cotidiano de Pepo Pérez que ha seducido a la mismísima Netflix, y puso la primera piedra a la cuadratura creativa del círculo que entre ambos propician en este nuevo proyecto expositivo de MaloEstudio. "El autoengaño y las fantasías personales para rehuir la vida real, así como el contraste entre los sueños y la realidad están presentes en El Vecino", adelantan a modo de sugerente advertencia.
El itinerario continúa con solo buscar el horizonte que, en otra de las salas Mingorance, también alcanza el dominio vigilante del joker. En cuanto el icono de Chema Cobo queda a la espalda, se reconoce esa especie animal predestinada al híbrido con lo humano que tiene como patente el cosmos que pinta y esculpe Chema Lumbreras. "Las ratas con cuerpo humano construyen una fábula amoral que interroga sobre las grandes cuestiones universales", asegura el artista malagueño en el vídeo de Kelvin Sacramento que se proyecta en este mismo segundo espacio.
No en vano, sus conejos y sus ratas adquieren un papel estelar en convivencia con las 'poupees' de Mari García, la responsable de un sugerente tratado visual sobre la belleza de lo macabro que no está reñido con un canto a la libertad y al erotismo. "Desde un planteamiento inquietante, las muñecas juegan con el subconsciente sin drama, con la ironía como lenguaje", explica la creadora de los personajes con los que culmina el itinerario expositivo que estará vigente hasta el 29 de septiembre en la sede del área de Cultura del Ayuntamiento de Málaga.
