"El Málaga seguro que saldrá del descenso. Está haciendo un buen trabajo, es un equipo correoso y tiene calidad. No bajará". Estas palabras las podría firmar cualquier componente de la plantilla malaguista, incluso un aficionado del Málaga de pro, muy optimista pese a la situación actual de los albicelestes. Pero es una frase de Marcelino García Toral, técnico del Zaragoza, cuando le preguntan por el Málaga, su próximo rival. Y no lo dice el asturiano porque sea buen amigo de Muñiz, lo afirma, sencillamente, porque lo piensa y lo sabe. Y ése debe de ser el sentimiento que entre hoy por la puerta de La Rosaleda en cada uno de los aficionados malaguistas, el de optimismo.

Y es que hoy, ante el Zaragoza, sólo vale ganar. Con unión, con convicción, por lo civil, por lo penal... Como sea. Hay que ganar y punto. Si es con ´jogo bonito´, pues mejor. Pero eso déjenlo para la selección española o para el Barcelona y el Madrid. Hoy es el Málaga el que agoniza. El que pide ayuda desde su pequeño mundo y el que necesita el apoyo de sus 23.000 abonados. No hay más opciones posibles para un equipo al que se le agotan los argumentos cada jornada que pasa.

Para afrontar esta primera final del curso, la plantilla y el entrenador han tenido tiempo para preparar el encuentro. Tras una semana sin fútbol, el Málaga debe de conocer al rival al dedillo. Además, ya se han visto las caras en dos ocasiones recientemente tras la eliminatoria de Copa en la que salió victorioso el conjunto de Muñiz. Pero en el vestuario malaguista nadie quiere hablar de aquella eliminatoria tan cercana, pero tan lejos en los pensamientos. El pase dejó sentimientos agridulces por la clasificación y por el juego rácano y especulativo del Málaga.

Por eso todos quieren que ante los maños no se sufra un ´deja vu´ para no cometer los mismos errores. Los cinco puntos son una losa que no le deja levantar cabeza al equipo y nueve jornadas sin conocer la victoria tocan la moral de cualquiera.

Por eso ya toca ganar. El Málaga buscará la victoria desde el principio. Le va la vida en ello y Muñiz podrá contar con toda su artillería. No están al cien por cien Duda ni Edinho. Sí moralmente, tras su clasificación para el Mundial, pero no físicamente. Sólo pudieron entrenar el viernes y ayer a las órdenes del míster.

Los que sí estarán serán Hélder, Apoño y Juanito, todos ellos recuperados de sus molestias. El asturiano recupera parte de su columna vertebral y aunque no estén a tope porque acaban de salir de unas lesiones, serán piezas claves para la victoria.

El rival. Marcelino, en el Zaragoza, también tiene problemas. Los resultados no acompañan y las lesiones también merman la capacidad del equipo maño. Por lo pronto, en Málaga no estarán Ayala, Pennant, Diogo, Braulio, Obradovic y Uche. Pero sí serán de la partida Lafita, Ewerthon y Arizmendi. Mucha calidad.