La gota que colmó el vaso fue la designación del partido Real Madrid-Osasuna en la franja horaria de las doce de la mañana. Pero ese malestar generalizado que ahora ha empezado a sonar con bastante fuerza era uno de los temas de conversación más repetidos desde que comenzó la presente campaña liguera. Al fútbol modesto ya no le queda ni el recurso de establecer sus encuentros durante las mañanas de los domingo. Y duele, tanto, que aseguran muchos dirigentes malagueños que a muchos equipos en categoría absoluta les quedan «los días contados».

Peinamos la provincia con la intención de ahondar en los males estructurales de categorías como Tercera División, donde esta campaña militan diez escuadras malagueñas, o Primera Andaluza, en la que otras 12 comparten protagonismo con apenas seis de Jaén.

En Nerja nos da la bienvenida Eduardo Camuñas, residente originario de San Juan de la Argentina. Colabora como taquillero y encargado de la barra para una escuadra local que por primera vez en su historia se halla en la cuarta categoría nacional. «La solución para que las aficiones vengan otra vez a estos campos está en que el fútbol profesional reconozca esta otra fase en la que se pone la base a lo que serán sus grandes futbolistas. Cada año hay muchos menos seguidores, porque se emiten cada vez más partidos por televisión y resulta más cómodo y económico quedarse en casa».

Las cifras hablan por sí mismas. En el histórico primer derbi de Tercera entre nerjeños y veleños, no se alcanzaron ni los 250 espectadores. La taquilla fue de poco más de 600 euros y, si se tiene en cuenta que cada partido tiene un coste de arbitraje por equipo de 381 euros, «no da ni para pagarles a los colegiados en los dos encuentros que se juegan cada medio mes, en casa y fuera». Y eso que se ha disputado esta vez el choque en día festivo, 1 de noviembre, sin fútbol profesional, o que los socios también tenían que abonar cinco euros en esta ocasión.

Carlos Medina es el presidente del Vélez CF. Su testimonio es rotundo: «Si jugásemos siempre a la misma hora que juega el Real Madrid, como nos ocurrió hace dos semanas, no podríamos vivir. Estaríamos obligados a desaparecer por falta de recursos». Ese día en la taquilla no obtuvo ni un euro y la rifa del jamón se vio muy mermada. «Otro problema añadido es ver que el Ayuntamiento cada vez tiene más demanda de colectivos y sin embargo no trata al Vélez en la medida justa, como el club con casi un siglo de historia. Se le debería tratar de otra manera, que no haya aquí café para todos», dice.

Piedras sobre su tejado

Coincide el presidente del Barrio Nuestra Señora de los Remedios de la Primera Andaluza, José de las Moras, en lamentar cada semana la falta de huecos horarios para poner los partidos sin coincidencia ni con los dos grandes, ni con el nuevo Málaga CF. Y agrega la contradicción más comentada entre los dirigentes del fútbol modesto en la provincia malagueña: «La Liga de Fútbol Profesional se está tirando piedras sobre su propio tejado porque las figuras del mañana están en los equipos base de ahora. Es pan para hoy...».

Su iniciativa, ante la falta de recursos económicos –el Consistorio también mantiene una deuda significativa con este club y las taquillas son muy reducidas–, puede extenderse a otras entidades no profesionales. «Aquí tenemos decidido y pactado con los jugadores que el día que perdemos, nadie cobra. Ni un euro». A falta de recursos, la mala racha de resultados, como mal menor, tampoco ha generado gastos en cuanto al capítulo de sueldos.

El delegado del Nerja, Salvador Martín, reconoce que en apenas tres meses son muchos los futbolistas que han dejado la plantilla, por el reajuste presupuestario que han impuesto «las malas taquillas recaudadas». Agrega que chavales del filial han tenido que incorporarse rápidamente para completar las convocatorias fuera de casa. Y Miguel Benítez, presidente de este club en los ochenta, insiste también en las «nuevas aspiraciones» de los jugadores. «Antes para los juveniles debutar con el primer equipo era un premio. Ahora primero te preguntan cuánto ganarán a partir de este momento».

Y aunque priman los gestos de resignación, las caras amargas en jugadores de Tercera que este verano denunciaron las deudas pendientes contraídas con clubes históricos como el CD Ronda, existen excepciones. Rafa Gil, exentrenador del Atlético Malagueño y ahora al frente de la UD Estepona –el líder del grupo noveno de esta categoría–, recalca que acude ahora más público al campo que en Segunda B. Y no resulta entonces extraño que hasta el Málaga CF busque un acuerdo de colaboración. Un rayo de sol, entre tanto nubarrón.

Las frases de los protagonistas

Rafa Gil, entrenador de la UD Estepona

"Somos realistas, el fútbol refleja la misma crisis que afecta a toda la sociedad"

El exentrenador del filial del Málaga CF e incluso preparador interino del primer equipo explica desde su nueva etapa como técnico del líder de Tercera que los clubes deben cuidar «que los chavales puedan cobrar».

Carlos Medina, presidente del Vélez CF

"Este año ya no hablamos de mensualidades con los futbolistas. Pagas cuando hay"

El dirigente veleño reconoce que no va a pedirle a un patrocinador que abone su deuda, si no tiene algún mes para pagar a sus propios empleados. La fórmula, borrar el concepto de mensualidad con los jugadores.

Francisco Valiente, técnico del Colegio de Entrenadores

"Deberían establecerse unos precios fijos. Ha habido sueldos injustificables"

Este veterano preparador malagueño, con experiencias en el fútbol balear o en Melilla, indica que el fútbol de Tercera también debe «mirar sus errores recientes», con sueldos de 1.200 euros a algunos futbolistas.

José de las Moras, presidente del Barrio N. S. Remedios

"Hay que jugar más que nunca con la verdad y hacer presupuestos reales"

Muchísimos futbolistas han abandonado la práctica de este deporte a pesar de su enorme potencial, asegura. «Es consecuencia, no en nuestro caso, de que muchos clubes han vivido por encima de sus ingresos».

José Luis Bobadilla, entrenador del CD Nerja

Ojalá podamos ver como antes los campos llenos. Pero va a ser muy difícil»

Desilusionado con la respuesta popular ante la histórica primera temporada del Nerja en Tercera, el alma de este club ha visto cómo muchos jugadores, sin público ni ingresos, han solicitado ya su baja como futbolistas.