Hay un fútbol que apenas se ve, que no llena ríos de tinta en los periódicos ni sale en las portadas de los principales diarios deportivos. Es el fútbol modesto. Quédense con un nombre. Se llama Jonathan Mejía Ruiz, pero futbolísticamente es «Jona», es paleño y suma la friolera de nueve goles en sólo 11 encuentros con el modesto CD Ourense, en el Grupo I de Segunda B (10º, con 15 puntos). Este delantero malagueño que dejó la Costa del Sol con sólo 18 años (ahora tiene 23) es el ídolo de este modesto equipo gallego que el pasado verano estuvo a punto de desaparecer y, además, el goleador más eficaz de la categoría de bronce del fútbol español, a pesar de que llegó al club orensano con la pretemporada ya avanzada.
El máximo goleador de 2ª B es Sergio Cirio (Hospitalet), con 10 goles en 13 encuentros (una reestructuración de este grupo, con la inclusión de un equipo más, ha motivado que se hayan disputado una o dos jornadas más que en los demás grupos). Pero Jona es el artillero más eficaz, ya que se perdió la jornada del estreno liguero y ha disputado 11 partidos (en la segunda y tercera jornada, saliendo desde el banquillo), en los que ha anotado nueve dianas, con dobletes en los dos últimos choques frente al Alcalá en casa y el Salamanca en El Helmántico. Los otros tantos fueron ante el Tenerife, el Marino de Luanco, el Sporting B, el Oviedo y el San Sebastián de los Reyes. Asimismo, ha marcado dos goles en Copa contra el Ávila y el Constancia de Inca balear. Un dato curioso es que, de los nueve goles conseguidos hasta la fecha, siete los ha logrado en la segunda parte. Su ambición goleadora parece no tener fin. Jona, con la confianza del técnico Luis Miguel Míguez, «Luisito», lleva promedios de récord, ya que hace dos años, en el filial del Dépor anotó cinco goles y en el pasado curso hizo 12 en toda la campaña. El atacante malagueño es el ídolo de la afición del CD Ourense, ya que ha mejorado con creces los promedios del exgoleador del equipo gallego Kiko Rey, que hizo ocho goles en 12 partidos. Un auténtico crack.
