Un cura y el ex alcalde de Antequera, implicados en un expolio de vidrieras

El hallazgo se produjo, según fuentes de la Guardia Civil, hace una semana por una patrulla del Seprona, cuyos agentes comprobaban cómo las reliquias estaban expuestas a la venta en el establecimiento. Según el instituto armado, la Iglesia de San Pedro está catalogada como Bien de Interés Cultural e integrada en el casco antiguo de Antequera, por lo que los agentes le imputaban al anticuario F. M. P. un presunto delito contra el Patrimonio Histórico. Según la Guardia Civil, la investigación implicaba un día después a Jesús Romero, director del Centro Municipal de Patrimonio Histórico de Antequera, ex alcalde del municipio entre 1994 y 2003, y ex director general de Bienes Culturales de la Junta, así como al sacerdote de la parroquia J. A. G. R., por la supuesta extracción de las vidrieras sin licencias ni autorizaciones. Romero, que habló con La Opinión de Málaga, matizó: «A mí me pidieron mi opinión y yo sólo le dije al párroco que eran unas simples cristaleras de lata y cristal de los años 50; que no tenían ningún valor patrimonial ni histórico. Estaban destrozadas y entraba polvo, agua y pájaros a la iglesia, así que decidieron cambiarlas». Aunque reconoce que la Guardia Civil le llamó para que declarase voluntariamente, aseguró no haber recibido ningún comunicado del juzgado que indique «que pueda estar implicado legalmente». Respecto a la protección de los bienes de esta iglesia, Romero matizó que San Pedro no tiene protección jurídica desde el punto de vista patrimonial, «por lo que las cristaleras, en caso de que tuviesen algún valor, no estarían protegidas por la ley». Por último, aseguró que las cristaleras no las vendieron a cambio de dinero, «sino que se las cambiaron al anticuario por una fuente para la iglesia».