Turismo

Los chiringuitos esperan superar este año máximos de facturación y clientes

Los empresarios de playas de la Costa del Sol reconocen que esta temporada se van a ver obligados a recurrir a estudiantes, después de formarlos de urgencia, para así atender la altísima demanda de mano de obra existente

Los chiringuitos malagueños cada vez están más presentes en el subconsciente colectivo, a partir de los típicos espetos y del creciente hábito del tardeo.

Los chiringuitos malagueños cada vez están más presentes en el subconsciente colectivo, a partir de los típicos espetos y del creciente hábito del tardeo. / Gregorio Marrero

Fran Extremera

Fran Extremera

Los chiringuitos de la Costa del Sol esperan batir este verano todos sus máximos históricos, tanto de facturación como de clientes o visitantes, aupados por el récord que se espera en el aeropuerto malagueño y el aumento del ticket medio. Además, ante la altísima demanda de mano de obra, la patronal del sector avanza que los empresarios se verán obligados a recurrir a estudiantes.

El presidente de la Asociación de Empresarios de Playa de la Costa del Sol, Manuel Villafaina, ha ampliado este último aspecto: «Vamos a tener que formarlos de urgencia, porque es cierto que en municipios como Málaga capital, Marbella o Nerja es difícil encontrar alojamientos para trabajadores cualificados que puedan venir a reforzar desde otras provincias las plantillas».

Con motivo de la celebración de la IX Cumbre del Grupo All Stars en Fuengirola, el concejal de Turismo de este municipio, José Luis Ponce, ha reconocido que el chiringuito se ha convertido en uno de los grandes atractivos que atesora la Costa del Sol. «En algunos casos se han visto obligados a modernizarse porque se les agotaban sus concesiones y nosotros, desde el Ayuntamiento, hemos propiciado que mejoren sus instalaciones», alegó este lunes.

En dicho foro, al que acudieron empresarios y productores de distintas provincias andaluzas, los ponentes indicaron que el ticket medio en este tipo de establecimientos ha pasado de unos 15 euros en 2017 a más de 40 durante el pasado año. Ahí entran en juego hábitos en constante crecimiento, especialmente a raíz de la pandemia, como el tardeo a pie de playa.

Villafaina ha aclarado que la subida del ticket ha estado también condicionada por la inflación, de manera que no ha tenido ese mismo reflejo en las cuentas de beneficios. Incluso hay algunas empresas que en determinados periodos han bajado a mínimos sus ganancias, al aumentar los gastos fijos en el capítulo energético. «Esta misma Semana Santa hemos tenido unos números que no se corresponden a la buena temporada que esperamos», alega este portavoz tanto provincial como autonómico.

Málaga es de hecho el motor de Andalucía en el sector de la hostelería, no sólo en términos turísticos, de manera que el propio Villafaina confirma aspectos como que mayo ha arrancado con números históricos en la Costa del Sol, para compensar ese bajo rendimiento que la Semana Santa caracterizada por las lluvias abundantes propició. «Estamos muy satisfechos con las perspectivas que hay y la creciente ruptura de la estacionalidad, con un invierno que ha propiciado la apertura anticipada de muchos establecimientos», matiza.

Segundo aspecto más valorado

Otro aspecto en el que ha hecho hincapié este veterano empresario es en una reciente consulta donde el chiringuito ha pasado a convertirse en el segundo reclamo más valorado por los visitantes que acuden a la Costa del Sol, sólo superado por la buena climatología. El espeto se ha situado como uno de los grandes reclamos para los turistas y es cierto, como expresó este lunes Villafaina, que el pescado a la brasa es propio de estos establecimientos, de manera que va ligado a tomarlo a pie de playa.

La buena meteorología durante los meses de invierno ha propiciado que muchas familias, ya fieles a consumir alguna de las comidas del día en los chiringuitos, incrementen sus visitas. Esa labor de fidelización es muy destacada por el sector: «Aquí puedes venir, si estás con el bañador y tienes prisa, a tomar simplemente una caña con tapa. Gastarte al mediodía esos cuatro euros. Y luego en otro momento acudir en familia o con amigos a tomar por la tarde unas copas. El flujo es continuado y la confianza con el cliente suele ser muy elevada».

Ayer, en Fuengirola, se analizó precisamente la importancia de la localidad como ejemplo de «destino gourmet 5.0», liderado por la evolución de sus chiringuitos hacia el concepto de club de playa.

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