Presión

¿Hay miedo a jugar en La Rosaleda?

Las últimas declaraciones de jugadores como Larrubia o Manu Molina han dado pie al debate entre algunos aficionados sobre el nivel de presión con el que el Málaga CF afronta sus partidos como local a las puertas del play off 

El Málaga CF tiene una de las plantillas más jóvenes de Primera RFEF.

El Málaga CF tiene una de las plantillas más jóvenes de Primera RFEF. / Gregorio Marrero

Beatriz Tocón

Beatriz Tocón

La Rosaleda ya no es el lugar seguro que le ha dado casi sistemáticamente los tres puntos al Málaga CF durante gran parte de la temporada. No solo atraviesa una mala racha el equipo a nivel general, sino que lo hace de forma particular como local y una publicación de David Larrubia en su cuenta de Instagram este lunes ha planteado el debate. ¿Hay miedo a jugar en La Rosaleda? ¿Ha entrado en juego, a dos semanas del play off, la presión mental? 

Esto fue lo que escribió el ‘10’ del Málaga CF en sus redes sociales tras el partido ante el San Fernando: «A veces el miedo es inevitable. Ese momento en el que te sientes perdido y no sabes por dónde tirar. Que tienes en mente unas cuantas cosas, pero no consigues encontrar el camino exacto para llegar. Y tiemblas, e incluso lloras. Y no pasa nada. 

No pasa nada porque hay momentos difíciles y momentos que nos ayudan a pararnos un segundo a pensar, relajarnos y dejar que la paciencia cobre protagonismo. Si sientes que estás perdido, no te preocupes. Al final todo llega, al final todo se consigue y al final te sentirás orgulloso de todo lo que has hecho. Solo tienes que ponerle ganas, dar lo mejor de ti y estar preparado para todo lo que venga. El secreto está en cómo lo mires»

Racha inesperada

Lo cierto es que no es casualidad que salga en estos momentos. El Málaga CF suma cuatro partidos consecutivos en los que no conoce la victoria delante de su afición: Intercity, Ceuta, Linares y Mérida. A ninguno de ellos han superado los de Martiricos justo cuando la presión ha empezado a apretar en la lucha por acabar lo más arriba posible.

¿Cuestión de juventud? Lo cierto es que estos jugadores han dado muchos pasos adelante a nivel de responsabilidad esta temporada. Siempre se ha hablado de que el Málaga CF es uno de los equipos más jóvenes del grupo II de Primera RFEF y ahora compite por un objetivo muy duro -al Deportivo de La Coruña le ha costado cuatro años- en lo que está siendo la primera experiencia como líderes de un equipo para muchos de ellos.

A esto se suma hacerlo en La Rosaleda. Cualquier futbolista que haya pasado por Martiricos reconoce que el estadio blanquiazul es de Primera División por el ambiente que se gesta en cada partido. No es fácil lidiar con 23.000 personas en cada encuentro y mucho menos cuando es de sobra conocido que un malagueño juega con una doble losa en casa. Precisamente, jóvenes y malagueños no faltan en la plantilla. Y si de los más veteranos aún se espera mucho más...

Málaga CF - AD Mérida.

El Málaga CF suma cuatro empates seguidos en La Rosaleda. / Gregorio Marrero

Factor mental

El factor mental es una de las grandes preocupaciones del cuerpo técnico y de los jugadores en las últimas semanas. No solo le da mucha importancia Pellicer para evadir a los futbolistas de todo el ruido generado, ya son los propios jugadores los que hablan de ello. Esto dijo Manu Molina tras el empate ante el San Fernando: «Que no nos pueda la presión, sabemos que es un club exigente. Estamos ya en play off, que la gente despeje la mente y esté tranquila». Y en esa línea continúa todo el discurso que se pueda transmitir en estos momentos desde Martiricos. 

 Ahora es el equipo el que necesita más que nunca la afición y el malaguismo no va a fallar. El partido contra el Antequera CF es vital para recuperar sensaciones, apagar cualquier incendio y volver a ganar. Y ahí sí, una vez superado el derbi provincial, cuando se vuelva a La Rosaleda será en un partido de play off y el miedo no puede ser una opción para optar al ascenso.