En Gran Canaria se puede disfrutar de algunas de las mejores piscinas del país. El portal Trivago ha incluido en su lista de top 15 a las piscinas de los hoteles Costa Meloneras y Sheraton Salobre. Ambas instalaciones tienen un efecto ilusorio, en el que el visitante cree que el agua de la piscina se extiende hasta el infinito hasta fundirse con el mar o el cielo de fondo. En la Costa de Meloneras el agua se mimetiza con el océano que baña El Faro y, en el Salobre, la piscina se queda suspendida en un cielo azul en el que se vislumbra hasta a El Teide. El sofisticado diseño de las piscinas motiva a miles de turistas a reservar sus vacaciones en dichas cadenas hoteleras. Muchos visitantes confiesan que lo suyo con las piscinas infinitas fue simplemente amor a primera vista.

En pleno agosto las piscinas se convierten en el gran reclamo de los huéspedes de un hotel. Sin embargo, hay piscinas que más allá de sofocar el calor de los bañistas, ofrecen una experiencia contemplativa. Las infinity pool, en inglés, son precisamente aquellas que bajo una ilusión óptica hacen creer a los visitantes que el agua se extiende hasta el horizonte, fundiéndose en un abrazo con el mar o la propia esfera celestial. En la lista de las 15 mejores piscinas de España y Portugal, que ha elaborado el portal Trivago a partir de las votaciones de los usuarios, se incluyen las de los hoteles Costa Meloneras, del grupo Lopesan, Sheraton Salobre Golf y R2 Río Calma de Fuerteventura.

Dos de las mejores piscinas de España y Portugal se encuentran en el municipio de San Bartolomé de Tirajana. Según las valoraciones de los usuarios del comparador de hoteles Trivago, las piscinas del Costa Meloneras, junto al Faro de Maspalomas, y el Sheraton, anclado en las entrañas del barranco en El Salobre, se sitúan entre las quince instalaciones que más furor despierta entre sus visitantes.

El motivo de merecer semejante privilegio no reside ni en sus dimensiones ni en la tecnología que se aplica para el reciclaje de sus aguas. El mérito consiste en un diseño de la piscina que juega con las ilusiones ópticas de sus bañistas, al hacerles creer que el agua desaparece con el horizonte. De ahí su nombre: infinita.

Muchos de los clientes de ambas cadenas hoteleras reservan su estancia motivados por ese efecto ilusorio. La familia alemana Bruns vio hace algunas semanas a través de las redes sociales una foto de la piscina infinita del Costa Meloneras y, en menos que tarda un clic en el ordenador, reservó sus vacaciones en el enclave sureño. "Desde que vi la imagen de la piscina, me prometí a mí mismo que este verano tenía que estar dándome un chapuzón en ella. Y lo mejor de todo es que con este clima he descubierto que no solo es posible en estos meses sino también en invierno", asegura el cabeza de familia desde su hamaca, mientras confiesa que desde que llegue a su país les enseñará las fotos de la piscina a sus amigos y vecinos "para dar envidia sana".

Ocho son los piscineros que se encargan de poner a punto la joya del Costa Meloneras. Desde las 06.00 horas comienzan las labores de limpieza a lo largo de los 100 metros de largo y 50 de ancho de la piscina. Ya a esa hora algunos bañistas deseosos de conseguir hamaca con vista a la infinidad del océano cogen puesto. "Lo primero que hacen después de desayunar es poner sus toallas en las tumbonas para asegurarse el sitio. Y algunos ni esperan al horario oficial de apertura para lanzarse al agua", comenta el trabajador Ancor Quintana, quien a lo largo de estos últimos 10 años ha visto como los huéspedes se pelean por tomar el sol al borde de la piscina infinita.

Con una capacidad de 5.000 metros cúbicos y una temperatura media de 30 grados en verano, la piscina de Meloneras dispone de una zona en sus proximidades que recrea una playa de arena fina y dorada. Antonio Ferreira y Francisco Freitas, ambos portugueses, tienen claro que este espacio es el elegido por el pequeño de la familia para jugar durante el día. "Venimos a este hotel todos los veranos, por la piscina en parte, pero por la calidad del servicio principalmente", explica Antonio.

Poca sorpresa expresó su cara cuando se enteró de que se encontraba en una de las mejores piscinas de España y Portugal. "Vivimos en la isla de Madeira y, a pesar de que también tenemos buenos hoteles e instalaciones de ocio para el turismo, puedo asegurar que aún no disfrutamos de una piscina de este nivel. Esto es el paraíso", alegó el portugués en tono cariñoso junto a su familia. A menos de 10 kilómetros al Sur, la vista al final de la piscina vuelve a fundirse con el mar de nubes de fondo. En la piscina infinita del Hotel Sheraton en el Salobre la gente hasta baila dentro del agua. La felicidad de sus bañistas se palpa en el ambiente y no es para menos. Una decena de camas balinesas, cuyas cortinas blancas revolotean con el fresco de la brisa marina, albergan el descanso y la relajación en estado puro. El recinto, exclusivo para adultos, posee los ingredientes mágicos para enamorar al personal.

"En estos momentos me siento como si estuviera flotando en el cielo de una isla desierta. Las vistas al mar y las montañas del alrededor convierten a este sitio en un lugar único", explica el matrimonio belga Bahf i, quienes habían probado los encantos de la cadena Sheraton en otros países pero no contaban con una piscina de este calibre para estas vacaciones.

Uno de los cómplices en este derroche de placer acuático es el experto en daikiris de fresa natural. El barman Pablo León prepara en su laboratorio de sabores del bar Sunset las pociones mágicas para que el atardecer en la piscina sea un acontecimiento memorable. Cuado baja el sol y el agua aún conserva la temperatura ambiente, los huéspedes del Sheraton acuden en manada a observar una estampa de lo más idílica: mar al fondo, montañas a los lados y, si el día está despejado, hasta el volcán de El Teide en un lateral. "La vista es espectacular y, sobre todo, si se disfruta después de una jornada de golf", explica Jordi Garlés en compañía de su mujer. Ambos son jugadores de golf y asiduos a la piscina infinita. "Ya me había dicho mi señora que se estaba muy bien en esta terraza, pero como en otras ocasiones solo había estado pendiente de la pelota y los hoyos no lo había comprobado. A partir de ahora no se me va a olvidar ", matiza Jordi con seguridad.

A su lado Montse, ya tiene hasta su tumbona preferida "por eso de que por algunos recovecos corre más el aire". Para los que aún no han encontrado la fórmula para darle un homenaje al cuerpo este verano, basta con incluir en los planes ir al sur de la isla en bañador y darse un chapuzón en algunas de estas dos piscinas infinitas. La relajación, al menos, está garantizada.

Las quince mejores piscinas de España, según Trivago

La lista de las 15 mejores piscinas de España y Portugal que el portal turístico Trivago ha elaborado a partir de las valoraciones de sus usuarios contiene un total de cuatro hoteles en el Archipiélago canario. Además de los dos citados anteriormente, el comparador de hoteles incluye las piscinas de los establecimientos Roca Nivaria en Tenerife y R2 Río Calma en Fuerteventura (como se muestra en la foto). En el resto del país, destacan el Hotel Hacienda Na Xamena en Ibiza, W Barcelona, Grand Hotel Central, Hotel Arts y Mandarín Oriental en la capital catalana, Sha Well-ness Clinic en Alicante, Jumeirah Port de Sóller en Mallorca y Nagari Hotel en Pontevedra. En Portugal, las piscinas más destacados se ubican en el Hotel Conrad Algarve, Eurostars Rio Douro y en Memmo Alfama, en la capital. Al margen de esta selecta enumeración, y ya en un entorno rural, las piscinas infinitas de la casa rural El Areal en Lugo y de Pedro Chicote en Cuenca, gozan de gran popularidad.