Si las cosas no se tuercen, en 2018 podrían iniciarse las obras del que será, una vez construido, el parque más grande de toda la provincia de Málaga. Sobre el papel, todo pinta de maravilla para los vecinos de Mijas en general y de Las Lagunas en particular, donde se ha proyectado una enorme zona verde de más de 350.000 metros cuadrados, con sus zonas deportivas, su auditorio, sus zonas lúdicas y de juegos para los más pequeños y que, además, contará con un proceso de participación ciudadana para pulir este gran pulmón verde por el que mucha gente hiperventila en Málaga capital. Desde que se anunciara la posibilidad de construir un gran bosque urbano en los terrenos de la antigua Repsol allá entre la Carretera de Cádiz y Cruz del Humilladero, todo han sido «peros» para una idea y un nuevo espacio en la ciudad que no debería generar tanto jaleo como está provocando. Sin ir más lejos, el próximo miércoles hay convocada una concentración en la plaza de la Marina por parte de uno de los grupos más activos en favor de la total utilización del enorme solar para la creación de un auténtico Bosque Urbano en Málaga.

Y entre unos y otros, entre mi proyecto y el suyo, entre las torres de De la Torre y una consulta ciudadana que primero sale adelante, meses más tarde se «descubre» que para qué hacerla, que no tiene validez y que hace unas semanas de nuevo volvía a decirse que sí, que tiene válidez, la casa sin barrer y el bosque sin coger musgo. Ya habrá vecinos de Mijas que estén pensando en la bici que le van a pedir a los Reyes para poder darse sus paseos hasta perderse por el enorme parque del que, en unos años, presumirá, mientras que en Málaga seguimos esperando un nuevo episodio de papeleo y desmentidos municipales que contrastarán con la gran foto verde que a buen seguro veremos publicada en este y en todos los medios de comunicación de Málaga el miércoles que viene. Y más allá de tamaños, de quién corte la cinta inaugural cuando haya cinta que cortar, de consultas, lo único que a mi me interesa y que debería interesar a todo el elenco municipal del Ayuntamiento de Málaga, es que el gran parque se haga una realidad. Con torres, sin torres, con un monumento de oro macizo de Francisco de la Torre a tamaño natural en una de las esquinas si quieren, pero que se haga el parque. No puede ser tan difícil.