Hasta cierto punto, lo de la tesis era tema menor: estando en el trono de tu partido, una conjura nada ilegal te destrona, y, aunque no te echan a la calle (podía haber seguido de diputado), te vas para mantener opciones. Pero mientras tanto algo hay que hacer, pues tienes familia, y para seguir en la docencia te pones a una tesis que puedas sacar rápido, en una universidad poco exigente y echándote una mano algún amigo. Aunque no entrecomilles ni cites siempre, eso pasa a veces con las prisas. La derecha lo usa a tope para tapar como sea la pifia enorme de su líder con el máster, pero en el fondo, aunque no sea nada ejemplar, no hay para tanto. Lo del plagio en un libro, sin cita de procedencia, ya es más grave. Aunque alegue error, o pueda decir que la culpa del plagio es del coautor, lloverá sobre mojado. Poco a poco se va formando charco. Si llega a piscina podría acabar ahogado.