"Sintió como una mano se apoyaba sobre la suya. La brisa marina sobre el Puente de los Alemanes era agradable. Volteó la cabeza y sus ojos se encontraron. Hola, pronunciaron los dos... Allí estaban,después de mas de veinte años. En el mismo lugar donde se vieron por primera y ultima vez.

En silencio, sus manos se entrelazaron. Olor a incienso, bullicio, puestos ambulantes, todo era igual que hace veinte años. Y ellos volvían a estar solos, aunque la gente les rodeara. Sonrieron y se encaminaron hacia la Iglesia de Santo Domingo. Pasaron junto a la capilla de Dolores del Puente, vacía en ese momento. Eran las 02.50 del Lunes Santo. Los tambores se oian a lo lejos, su "Loli" se acercaba. Ella lleno sus pulmones con aire de Semana Santa, aire de Málaga. Pronto les volvería a bendecir, y esta vez, para siempre..."