Despedida

Brizuela: "La felicidad en Málaga no sé si la vamos a replicar"

El ya exjugador del Unicaja quiso agradecer al club todos los momentos vividos tras una decisión de marcharse al Barça que "emocionalmente ha sido más difícil que racionalmente"

López Nieto: "Las puertas del club siempre van a estar abiertas"

López Nieto hace entrega a Darío Brizuela de una camiseta por sus 173 partidos.

López Nieto hace entrega a Darío Brizuela de una camiseta por sus 173 partidos. / UNICAJAB/FOTOPRESS

Beatriz Tocón

Beatriz Tocón

Día especial y emotivo en el Martín Carpena para decir adiós a una de las grandes insignias del Unicaja de los últimos años: Darío Brizuela y sus 173 partidos como verde y morado. Antonio Jesús López Nieto, Juanma Rodríguez, Ibon Navarro, representantes de la plantilla y del cuerpo técnico, su familia o incluso el expresidente Eduardo García, el exdirector deportivo Manolo Rubia y el excapitán Carlos Suárez estuvieron presentes este miércoles en el acto de despedida del que ya es jugador del Barça.

"Habla de la calidad humana de la persona a la que le vamos a decir hasta luego. El deporte tiene sus caminos. No hay que dramatizar, sino naturalizar la situación. Cuando un equipo económicamente superior hace una oferta, hay que decirle 'gracias por lo que me diste, disfruta y triunfa en el futuro'. Esto es lo que espero que pase excepto cuando juegue contra nosotros. Con él hemos vivido momentos buenos y menos buenos. Desde el Unicaja tuve el placer de llevarle la camiseta y el carné a su hijo. Agradecerte, Darío, lo que nos has dado, las puertas del club siempre van a estar abiertas", fueron las palabras con las que se despidió el presidente.

Imagen de la despedida de Darío Brizuela.

Imagen de la despedida de Darío Brizuela. / UNICAJAB/FOTOPRESS

Brizuela se marcha a otro club, pero solo tiene palabras de agradecimiento para lo que le ha dado la entidad de Los Guindosy la ciudad, con un recuerdo muy especial. "He intentado dar el máximo, con resultados buenos y malos. El mejor recuerdo que tengo, además de lo deportivo, es mi hijo. Mi hijo va a saber que es de Málaga. Siempre me voy a acordar de estos años. Málaga nos ha ayudado a ser mejores personas. Los amigos me los llevo para toda la vida. Solamente quería dar las gracias".

Una decisión que, como él mismo explicó, "emocionalmente ha sido más difícil que racionalmente". "Deportivamente ha sido fácil porque es un paso que todo jugador de baloncesto quiere dar". No obstante, hay una cuestión que tiene muy clara: "Fue una decisión larga porque la comunidad y la felicidad en Málaga no sé si la vamos a replicar. Tampoco fue fácil hablar con Alberto. Separarte de tus lazos es complicado. A día de hoy me sigue costando un poco emocionalmente", explicó. 

Darío Brizuela y Alberto Díaz, compañeros ahora en la selección española.

Darío Brizuela y Alberto Díaz, compañeros ahora en la selección española. / UNICAJAB/FOTOPRESS

Ejemplo de eso mismo es la presencia de todos sus compañeros que ya están en Málaga. ¿Qué supondrá en el vestuario su salida? "Aquí se queda el equipo, yo solo era una pieza de bloque. El entrenador sigue, me han cambiado por una pieza de nivel -Kameron Taylor-. Aspiran a ganar la Basketball Champions League, la Copa del Rey que será aquí... no va a cambiar nada en absoluto". ¿Y sobre su regreso al Palacio? "Imagino que habrá aplausos, pero en el partido no habrá muchos. Conozco a la gente de Málaga, no regalan ni una canasta".

Despedida Darío Brizuela en el Martín Carpena tras su fichaje por el Barça

Un nuevo reto en la Euroliga

"Por muy feliz que esté en Málaga, se me ha plantado un reto muy grande y es un paso más en mi carrera. Es un club muy importante en España y es muy difícil decirle que no". Un objetivo muy importante como es la Euroliga que le habría "encantado jugar con este club". Ahora bien, le agradece al Unicaja "haberlo puesto tan fácil" a la hora de negociar. 

No obstante, ahora se queda con todo lo vivido en Málaga. "En los momentos malos se ven cómo son las personas de verdad. Los momentos de tensión cuando estábamos mal... son muy buenos recuerdos. Me quedo con la sensación que he intentado dejar aquí con los compañeros de que hay que disfrutar y trabajar todos los días. Más allá de la Copa, que quedará en las fotos, el recuerdo que queda de las personas es el día a día". Un camino que, ahora sí, acaba para Darío Brizuela como jugador del Unicaja.