­El conflicto interno que desde la pasada década vive la Policía Local de Torrox ha creado todo tipo de circunstancias, anomalías y hasta procesos judiciales que en breve podían generar nuevos titulares. No obstante, los portavoces sindicales de la plantilla denunciaron ayer que el expediente abierto a dos agentes por multar a un total de 16 vehículos durante la tarde del 1 de mayo «supera cualquier otro despropósito».

El alcalde, el socialista Francisco Muñoz, avanzaba en un comunicado público que la Jefatura ha abierto «expedientes informativos al jefe de la Unidad de Policía de Barrio y a un agente de dicha unidad para conocer por qué habían actuado de forma contraria a los objetivos establecidos en sus servicios». Sin embargo, después de una reunión de urgencia, varios agentes aseguraban a este periódico que la legislación «ampara a todo agente que en el desempeño de cualquier actividad pueda observar un coche mal aparcado y proceda a multarlo».

En este sentido, un agente de la agrupación local de la UPLB-Andalucía avanzaba que no sería extraño que se produjesen nuevas bajas en el seno de la plantilla, «si tenemos en cuenta que se ha dado la circunstancia de que algún agente expedientado ahora por multar, fue expedientado también meses atrás por no haber multado coches mal estacionados y a instancias de una orden directa del máximo responsable policial».

Muñoz remarcó que, durante el turno de tarde del pasado 1 de mayo, la Unidad de Policía de Barrio denunció a 16 vehículos «estacionados en la barriada de Los Llanos, Venta Espinosa y calle Cáceres», todos núcleos situados en el extremo más occidental del municipio, entre Torrox Costa y El Morche.

Según consta en el informe realizado por el jefe del Cuerpo, relató el regidor, los policías «tenían encomendadas en dos órdenes anteriores un servicio policial en materia preventiva de Policía de Barrio respecto al cumplimiento de las ordenanzas de tenencia de animales, venta ambulante o limpieza».

Agregó Muñoz que sobre estos aspectos «no hubo ningún resultado», pero sí en materia de ordenación del tráfico y en los términos ya referidos. El alcalde insistió en que la Policía Local es un «cuerpo jerarquizado en el que los funcionarios deben seguir las instrucciones y criterios de servicio que establecen sus superiores, algo que parece se ha incumplido claramente en este caso».

Fuentes sindicales agregan que estos expedientes se abren, además, justo después de que el propio jefe policial viviese hace unos días una vista que podría acarrearle una condena de prisión e inhabilitación. Además, los agentes consultados mostraron su «sorpresa», al subrayar Muñoz que la actuación reseñada de ambos policías había podido alterar, como consecuencia de esas 16 multas, «la normalidad de un barrio».