La carretera A-377, que une los pueblos de la Serranía de Ronda con la Costa del Sol, está plagada de baches y socavones y carece de la señalización adecuada. Su arreglo es una reivindicación histórica desde hace 12 años por el Consistorio de Casares. Ayer el delegado de Fomento de la Junta de Andalucía, Francisco Fernández, se comprometió a acometer el arreglo de la vía por tramos, aunque sin fecha concreta.

Así, en la reunión mantenida ayer con el alcalde de Casares, José Carrasco, el delegado reconoció que la carretera A-377 figura como prioridad de su departamento en la provincia, pero eludió un compromiso firme hasta que no se elaboren los presupuestos para 2016 al desconocer si habrá partida presupuestaria para acometer las obras.

Fernández destacó que el proyecto está elaborado y dividido en tres fases, con la intención de abordarlas de forma sucesiva, ya que la falta de financiación hace inviable acometer el arreglo integral de la vía.

Carrasco mostró su deseo de que al menos la primera fase se ejecute en 2016.