'Como la luz de un sueño': el proyecto de un colegio de Almáchar reconocido por su trabajo

El colegio La Parra de la localidad axárquica de Almáchar ha recibido este pasado jueves un reconocimiento por un proyecto en el que se ha involucrado toda la comunidad educativa y todo el pueblo bajo el lema ‘Como la luz de un sueño’.

Este premio sirve de motivación y alimenta las expectativas en la educación de los niños de este pueblo; expectativas que, en el seno de un pueblo rural se vuelven muy necesarias para demostrar que el futuro de sus habitantes puede ir perfectamente más allá de la agricultura.

Con una población de apenas 2.000 habitantes, gran parte de sus vecinos tienen la necesidad de bajar a trabajar a pueblos vecinos como Vélez-Málaga o Torre del Mar, pero algo que destaca la directora del centro, Carmen Matés, es que "a pesar de ello, los almachareños nunca pierden la vinculación con el pueblo". Este lazo de conexión resulta clave para explicar cómo se desarrolla la comunidad educativa.

Comunidad de aprendizaje

Desde 2016 La Parra de Almáchar cuenta con el reconocimiento de la Junta de Andalucía que lo acredita como centro de comunidad de aprendizaje, lo que significa que la educación no corre solamente a cargo del profesorado que la transmite, sino que toda la comunidad educativa puede ser partícipe de dicha educación, involucrando incluso a las familias dentro de la escuela.

Premiados por prestar su voz para lograr una escuela inclusiva

Este hecho refuerza la idea y la importancia de que las familias vean el trabajo del centro desde dentro y puedan creer y confiar más en la educación alimentando así sus expectativas. 

Uno de los pilares en los que esta comunidad de aprendizaje fija sus bases son la inclusión y la participación, para de esta manera poder dar respuesta, no solo al alumnado con necesidad educativa especial, sino también poder dar respuesta a cualquier alumno.

En este sentido, el colegio puso en marcha un proyecto de investigación con la Universidad de Málaga del que surge una interesante línea de intervención que señala la dramatización como una actividad clave para desarrollar una comunicación lingüística que pueda aportar a los alumnos desde la empatía.

Seguiremos inventando, seguiremos escuchando a la comunidad

Carmen Matés

— Directora del CEIP la Parra de Almáchar

Un proyecto premiado

En ese afán del colegio por plantear actividades que pudieran involucrar a toda la comunidad educativa, poniendo la educación de este pueblo rural como un referente y alimentando las expectativas de sus familias, aparece el deseo de acercar la vida de Almudena Grandes a los más pequeños.

De esta manera aparece la posibilidad de crear una asignatura de diseño propio que se nombra como proyecto interdisciplinar de dramatización. Gracias a esa asignatura y a otro proyecto en marcha en el centro, Proa+, surge el documental guionizado y dirigido por Ezequiel Comesaña que resume la experiencia llevada a cabo.

En este proyecto el fin principal es dar reconocimiento a la obra de Almudena Grandes y sobre todo al compromiso social que esta conlleva. Durante la celebración de seis sesiones de dos horas, al alumnado se le hacen llegar los valores que se viven en la obra. En cada una de esas sesiones los alumnos son capaces de conocer distintas situaciones extraídas de cada uno de los libros de la escritora, así como conocer y acompañar a sus personajes. En estas sesiones emanaban gran cantidad de interesantes problemas como la falta de servicios en el entorno rural, los derechos de las mujeres y la vida de las mujeres en el entorno rural, entre muchas otras.

La colaboración del pueblo y de voluntarios tanto de la comunidad como de actores de teatro resultó esencial para el correcto desarrollo de las actividades que tuvieron lugar en sitios tan diversos como la Biblioteca municipal, un bar del pueblo, la casa de la cultura o el patio del propio centro.

El proyecto, premiado este pasado jueves 14 de marzo con el Reconocimiento a las Buenas Prácticas por la Conferencia de Decanos de Educación de Andalucía, Ceuta y Melilla; culminó con el estreno del documental de Comesaña en la Casa de la Cultura del pueblo, en la Universidad de Málaga y en el Festival de Cine de la Axarquía (donde resultó premiado).

Este caso se podría resumir como "una educación grande en un pueblo pequeño", que no tiene miedo de sumergirse en nuevas e innovadoras metodologías que sin ninguna duda dan sus frutos y consiguen integrar a toda una comunidad educativa y a un pueblo entero que cada vez tiene más expectativas en el futuro de sus más pequeños.