El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, dijo este jueves que hay demasiados bancos en Europa y por ello su rentabilidad es en estos momentos tan baja.

En su discurso de inauguración de la primera conferencia anual del Consejo Europeo de Riesgo Sistémico, Draghi reconoció que los bajos tipos de interés también presionan a la rentabilidad de los bancos, como se ha argumentado con frecuencia.

Uno de los principales problemas que afrontan los bancos europeos es su baja rentabilidad.

Los tipos de interés reales a largo plazo han caído en la mayoría de las economías avanzadas durante dos décadas, dijo Draghi.

Los factores que presionan a la baja las tasas de interés a largo plazo son los cambios tecnológicos, demográficos, la desigualdad de ingresos y la escasez de activos seguros.

Asimismo, Draghi reconoció que la política monetaria del BCE y otros grandes bancos centrales, que han actuado de acuerdo con sus mandatos de salvaguardar la estabilidad de precios, también ha contribuido a los bajos tipos de interés y a reducir los márgenes de intereses.

Pero el excesivo número de entidades es "también un factor del actual bajo nivel de la rentabilidad de los bancos", según Draghi, que también preside el Consejo Europeo de Riesgo Sistémico, un organismo creado después de la crisis financiera para evitar que se repitan situaciones similares.

El exceso de capacidad en los sectores bancarios de algunos países y la consiguiente intensidad de la competencia exacerba esta presión sobre los márgenes.

"Este exceso de capacidad también significa que el sector no opera en el límite eficiente, lo que es una razón por la que los ratios de costes e ingresos siguen altos en algunos países", apostilló Draghi.

También dijo que los bancos se benefician de las revalorizaciones de sus carteras de rentas fijas y, además, la rentabilidad de los bancos aumenta por un flujo mayor de préstamo y unas provisiones para pérdidas por préstamos menores, que se hubieran producido en ausencia de una política monetaria expansiva.

"La imagen varía dependiendo de los modelos de negocio de los bancos", según el presidente del BCE.

Revisar el modelo de negocio

Algunos bancos necesitarán revisar sus modelos de negocio para impulsar la rentabilidad en un contexto de exceso de capacidad e innovación tecnológica.

Los bancos que ofrecen garantías de retornos a largo plazo, como los seguros de vida con retornos garantizados, se van a enfrentar a un futuro de baja rentabilidad al menos que adapten sus modelos de negocio a un mundo cambiante, dijo Draghi sin nombrar bancos ni países.

Este es el caso de muchos bancos alemanes, que deben reducir sus costes y fusionarse entre ellos.

Los presidentes de Deutsche Bank y Commerzbank, John Cryan y Martin Zielke, dijeron recientemente en un congreso de banca que hay demasiadas entidades bancarias en Alemania.

El proceso de consolidación ya se lleva a cabo en las cajas de ahorro alemanas, donde se producen fusiones progresivamente, como ocurrió en el pasado en otros países como en España, aunque ahí de forma más abrupta.

En Alemania había a finales del año pasado 1.793 institutos de crédito, de los que 413 son cajas de ahorro, según cifras del Bundesbank.

La cantidad se ha reducido en comparación con los 1.830 en 2014 y 1.866 en 2013.

El número de empleados en banca en Alemania es de casi 626.240 personas, también según datos del Bundesbank.

Los bancos son fundamentales en la financiación de las pymes, una parte clave de la economía europea.

El préstamo bancario debe fluir a proyectos productivos si Europa va a prosperar, pero la realidad es que crece demasiado rápido cuando la economía se expande y se reduce con fuerza cuando se contrae.

Como resultado de la crisis financiera, el crecimiento económico en países con sistemas financieros muy influidos por los bancos está por detrás del de naciones con sistemas más equilibrados.

Draghi dio un claro mensaje político: es mejor financiar la economía real a través de varios canales que confiar sólo en uno.

Los mercados de capital pueden actuar como una "rueda de repuesto" útil, dijo Draghi.