El Partido Popular ha ganado las elecciones en la provincia de Málaga pero ha perdido casi un tercio de los votos que obtuvo en las elecciones generales de 2011.
En esta ocasión, el partido socialista ha ganado en 73 municipios de la provincia, frente a 27 en los que ha vencido el Partido Popular y los 3 en los que ha ganado Izquierda Unida.
Los llamados partidos emergentes se han quedado a las puertas de gobernar en algunos municipios, claramente de izquierdas en el caso de Podemos, y bastiones del Partido Popular, en el caso de Ciudadanos.
El Partido Popular ha vuelto a cimentar su victoria en los municipios de mayor población, principalmente de la costa, aunque ha cedido la victoria en dos municipios del litoral, como Manilva y Algarrobo.
El partido de Mariano Rajoy, que en Málaga lideraba al Congreso José María García Urbano, ha resistido el envite y ha mantenido las grandes capitales del litoral malagueño a pesar de que se ha dejado casi un tercio de los votos en feudos tradicionales como Estepona, Marbella, Fuengirola, Benalmádena, Torremolinos y Nerja.
La sangría de votos que ha perdido el PP ha sido mayor incluso en otros municipios como Alhaurín de la Torre, Alhaurín el Grande, Rincón de la Victoria y Vélez Málaga.
Donde no ha podido resistir el envite ha sido en municipios del interior como Antequera y Ronda. El PP ha cedido terreno en favor del PSOE en los municipios de menor población la Serranía de Ronda, en el cinturón norte de la provincia y en el interior de la Axarquía.
El PP ha perdido nada menos que 17 municipios, los mismos que han recuperado los socialistas y se ha dejado estos cuatro años 134.000 votos, más de un tercio de los sufragios obtenidos en las elecciones generales de 2011.
Mejor encaje. Por contra, el partido socialista ha sabido encajar mejor el empuje de los llamados partidos emergentes y ha recuperado grandes capitales que tradicionalmente habían sido feudos del PSOE como Ronda y Antequera.
Además, los socialistas han recuperado enteros entre sus feudos tradicionales, los pueblos del interior de la provincia, volviendo a ganar en municipios de la Serranía de Ronda, en el Valle del Guadalhorce y en el interior de la Axarquía.
El PSOE ha sido la segunda fuerza más votada, aunque ha obtenido la victoria en tres de cada cuatro municipios de la provincia, donde sólo ha perdido 20.000 votos, apenas un 10% de los votos obtenidos las pasadas elecciones.
Izquierda Unida ha perdido un 20% de sus votos -12.000 votos- pero además de conservar el único municipio donde había vendido en 2011 -Arriate- ha obtenido la victoria en los pueblos de Istán y Sedella.
Quienes se han quedado a las puertas han sido los llamado partidos emergentes, que no han tenido tiempo de hacer valer las alcaldías que tienen en la provincia de Málaga para arañar votos, como son los casos de Mijas -donde el Partido Popular ha perdido casi la mitad de los votos en favor de Ciudadanos, que la final ha quedado como la tercera fuerza más votada por detrás del PSOE, al que le han faltado poco más de 300 votos para recuperar la hegemonía en las generales.
En la otra alcaldía de Ciudadanos en la provincia, Alcaucín, el PSOE ha conservado su hegemonía y el partido naranja ha quedado como tercera fuera política.
Por su parte, Podemos, tercera fuera en la provincia, ha resultado la segunda más votada en municipios como Alameda, Benadalid y Humilladero.
